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Por Gianluca Frinchillucci
Garowe (Agencia Fides) - La región semi-autónoma de Puntlandia, en el noreste de Somalia, está viviendo una fase crítica debido al aumento de la violencia vinculada a grupos armados yihadistas afiliados al autoproclamado Estado Islámico (ISIS).
El reciente atentado del 31 de diciembre de 2024 contra Mohamed Baari Shire, joven vicepresidente del Parlamento, destaca los desafíos de la región para garantizar la estabilidad y seguridad. Este ataque, perpetrado en la región de Bari, incluyó explosiones suicidas y un asalto armado coordinado por militantes del ISIS. Aunque las fuerzas de seguridad de Puntlandia lograron repeler la ofensiva, el enfrentamiento dejó bajas en ambos bandos. Según fuentes locales, el objetivo del ataque era desestabilizar las instituciones locales en un contexto ya tenso por las dificultades políticas y sociales.
Entre los agresores se identificaron combatientes extranjeros procedentes de Marruecos, Tanzania, Yemen y Libia, lo que evidencia el carácter transnacional de esta amenaza. Desde su aparición en 2015, el ISIS en Puntlandia representa un desafío constante para las autoridades, que además deben enfrentarse a la competencia del grupo paramilitar yihadista al-Shabaab por el control de recursos y rutas comerciales estratégicas en el golfo de Adén.
Mohamed Baari Shire, joven vicepresidente del Parlamento de Puntlandia, busca representar una nueva esperanza para la gobernanza en esta región semiautónoma del noreste de Somalia. Su liderazgo, centrado en el desarrollo y la estabilidad, destaca en un territorio a menudo marginado dentro del panorama político somalí. El reciente intento de asesinato del que logró escapar ha fortalecido el apoyo público hacia Shire, quien se ha convertido en un símbolo de resiliencia para una población exhausta tras años de conflicto.
Además de las operaciones de seguridad, el gobierno de Puntlandia está intensificando sus esfuerzos para abordar las urgencias sociales y económicas que contribuyen a la inestabilidad de la región. Entre los problemas más graves se encuentran el desempleo y las limitaciones en el acceso a la educación y los servicios sanitarios, factores que aumentan la vulnerabilidad de los jóvenes al reclutamiento por parte de grupos armados.
En colaboración con entidades como el Centro de Investigación para el Desarrollo de Puntlandia (PDRC), las autoridades locales están promoviendo iniciativas de diálogo comunitario e inclusión social. Además, se están llevando a cabo inversiones en infraestructuras, programas educativos y servicios de salud, con el objetivo de mejorar las condiciones de vida de la población. Particularmente, se busca crear oportunidades de empleo para los jóvenes, quienes representan una parte crucial del esfuerzo por construir un futuro más estable.
El profesor Sonkor Geyre, director del Heritage Institute for the Horn of Africa (HI4Horn), ha destacado la importancia de una colaboración más estrecha entre Puntlandia y el gobierno federal somalí para afrontar de manera efectiva la amenaza de las milicias afiliadas al ISIS. Según Geyre, “las frías relaciones entre el gobierno federal y Puntlandia han obstaculizado la acción coordinada contra el ISIS. La región tiene un papel clave que desempeñar para determinar el avance hacia la paz en el Cuerno de África, donde el terrorismo no debe encontrar refugio”.
El gobierno de Puntlandia ha anunciado una ofensiva militar a gran escala en las montañas de Alimiskat, con el objetivo de desmantelar las bases operativas del ISIS. Sin embargo, la lucha contra el terrorismo no puede limitarse únicamente al ámbito militar; el futuro de la región depende de su capacidad para equilibrar la seguridad, el desarrollo y la inclusión política.
Un enfoque integrado que combine operaciones militares con intervenciones sociales sostenibles es esencial para alcanzar una paz duradera. La colaboración efectiva y el apoyo de la comunidad internacional pueden convertir a Puntlandia en un modelo de estabilidad y cohesión en el Cuerno de África
(Agencia Fides 4/1/2025)