El Cairo (Agencia Fides) - La nueva ley sobre el estatuto personal, en la que las instituciones egipcias trabajan desde hace años, debe ser aprobada y entrar en vigor "lo antes posible", debe ser equilibrada y prever medidas adecuadas también para contrarrestar fenómenos insidiosos como el preocupante y vertiginoso aumento de los divorcios.
Estos son los llamamientos y consideraciones que el presidente egipcio Abdel Fattah al Sisi viene repitiendo con insistencia en los últimos tiempos, y que ha vuelto a reiterar la tarde del martes 10 de mayo, hablando por teléfono a un programa de noticias emitido por la cadena de televisión Sada El Balad.
La nueva ley sobre el estatuto personal, lleva esperándose desde hace décadas por la Iglesia copta ortodoxa y otras Iglesias y comunidades eclesiales presentes en Egipto, para que sirva como un instrumento legislativo necesario para subsanar las incoherencias y la discriminación, proporcionando disposiciones equilibradas sobre cuestiones delicadas, incluido el derecho de familia (véase Fides 11/1/2022). Desde hace tiempo - y con más insistencia desde el pasado mes de enero -, los medios de comunicación anuncian como inminente el debate parlamentario para la aprobación de los textos y proyectos de ley sobre el estatuto personal presentados por el Gobierno.
La revisión del testo legislativo sobre el estatuto personal, que ha pasado mucho tiempo en el Ministerio de Justicia egipcio, concluyó en el primer semestre 2021 (véase Fides 6/7/2021). En lo que respecta a la parte referida a los cristianos, el proceso de revisión se llevó a cabo durante 16 sesiones de trabajo, auspiciadas por el Ministerio, que reunieron a expertos, funcionarios del departamento gubernamental y representantes de las distintas confesiones cristianas, convocados por las autoridades civiles para perfeccionar el texto y obtener el consentimiento de todas las Iglesias y comunidades eclesiales sobre la redacción de todos los artículos del proyecto de ley.
La participación de las Iglesias cristianas presentes en Egipto en el largo proceso de elaboración de una nueva ley sobre el estatuto personal ya había comenzado en 2014 (véase Fides 22/11/2014). Ya entonces, el Ministerio de Justicia había presentado un proyecto de ley a los líderes de las distintas Iglesias, con la petición de que estudiaran el texto y enviaran sus consideraciones al respecto en un plazo breve. El tiempo de elaboración del proyecto se alargó sobre todo por las negociaciones encaminadas a garantizar la formulación de un texto que, siendo unitario, siguiera protegiendo las diferencias existentes en materias como la separación matrimonial y el divorcio, reguladas de forma diferente por las distintas confesiones cristianas. El borrador del texto legislativo unitario, elaborado por consenso por los representantes de las distintas Iglesias y comunidades eclesiales, fue entregado a las autoridades gubernamentales el 15 de octubre de 2020.
Ahora, las declaraciones del presidente al Sisi en su discurso televisado del martes 10 de febrero también sugieren que lo que está frenando la aprobación final de la nueva legislación sobre el estatuto personal son principalmente las objeciones de las autoridades y los exponentes islámicos, y se centran en particular en la cuestión del divorcio.
El presidente al Sisi ha dicho, entre otras cosas, que consideraba a los jueces, al gobierno, al parlamento y a los juristas de la Universidad suní de Al-Azhar como “responsables ante Dios” de lo que se ha hecho con respecto a la resolución de problemas y situaciones de injusticia relacionados con la cuestión del estatuto personal. Al Sisi también ha expresado su temor de que los jóvenes eviten el matrimonio en Egipto debido a la elevada tasa de divorcios en el país, señalando que las mujeres están penalizadas por las leyes de matrimonio, repudio y divorcio actualmente en vigor.
Los medios de comunicación egipcios atribuyen al Centro Islámico Suní de Al-Azhar la redacción de un proyecto de ley sobre el estatuto personal presentado al Parlamento como alternativa al redactado por el gobierno egipcio.
En febrero de 2017, como referido por la Agencia Fides (véase Fides 7/2/2017), El Consejo de los Ancianos de al Azhar, organismo del vértice de la institución académica más importante del islam sunita, había rechazado las peticiones del Presidente Abdel Fattah al Sisi para contrarrestar la práctica del “divorcio verbal” islámico, que permite a los hombres romper el vínculo matrimonial con su mujer con una simple declaración verbal. En un comunicado oficial, el Consejo de Ancianos de al Azhar confirmó la validez del “divorcio verbal”, ya que esta práctica cumple con las condiciones de la ley islámica y fue introducida desde los tiempos del profeta Mahoma.
La práctica del “divorcio verbal” es una prerrogativa reservada a los hombres.
(GV) Agencia Fides 11/5/2022)