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Kinshasa (Agencia Fides) - Ha sido inaugurado en Goma, capital de Kivu del Norte (al este de la República Democrática del Congo, RCD), el centro de inteligencia conjunta de la Conferencia Internacional para la Región de los Grandes Lagos (CIRGL), cuya misión es combatir contra los grupos armados que actúan en la zona. El equipo está formado por oficiales de los servicios secretos de los Estados miembros de la CIRGL (RDC, Angola, Zambia, Tanzania, Burundi, Ruanda, Uganda, República Centroafricana, República del Congo, Kenya, Sudán), más Sudán del Sur, coordinados por un general de Angola.
En la ceremonia de apertura del centro también estaba presente una delegación de Ruanda, a pesar de las recientes tensiones entre Kinshasa y Kigali, causadas precisamente por el supuesto apoyo de Ruanda al movimiento M23 formado por desertores del ejército congoleño, según lo indicado en un informe de la ONU (véase Fides 29/5/2012). Pero no han faltado las polémicas por esta cooperación multinacional para detener la violencia en el este de República Democrática del Congo. En un editorial reciente enviado a la Agencia Fides desde la “Red Paz para el Congo”, se plantea, ante las pruebas recogidas por la ONU sobre la implicación ruandesa en la rebelión del M23, si “el gobierno congoleño se limitará a buscar soluciones en sinergia con los estados de la región de los Grandes Lagos”, firmando otros acuerdos-trampa con el régimen ruandés. “Este ya ha demostrado que no es sincero en sus relaciones con la República Democrática del Congo y que cuando firma acuerdos bilaterales con ella, es sólo para defender sus intereses a expensas de la sangre de millones de congoleños inocentes”. (L.M.) (Agencia Fides 14/6/2012)
