ÁFRICA/CONGO RD - “Tememos una navidad sangrienta como la del 2008”: afirmó a Fides el Obispo de Isiro-Niangara

Niangara (Agencia Fides) – “Tememos una nueva masacre como la de la Navidad del 2008. Vivimos en la total inseguridad”, afirma a Fides Su Excelencia Mons. Julien Andavo Mbia, Obispo de Isiro-Nianagara, al noreste de la República Democrática del Congo, donde los rebeldes ugandeses del Lord’s Residence Army (LRA) amenazan con repetir la masacre de la Navidad del 2008, que le costó la vida a almenos 800 civiles inocentes (ver Fides 9/1/2009 y 14/1/2009).
“Hace dos días los rebeldes del LRA atacaron la población de Tapili (a más o menos 50 km de Niangara), provocando la muerte de algunas personas y forzando a más de 2 mil habitantes a fugar, los cuales se encuentran ahora en Niangara, sin ninguna clase de asistencia”.
La población de la zona afirma haber visto unos volantes del LRA en los que se amenaza con repetir masacres similares a las del 2008. “Festejaremos la Navidad con ustedes”, está escrito en uno de los volantes. “Si no interviene a tiempo la comunidad internacional y las autoridades locales, existe el riesgo concreto de una nueva Navidad sangrienta”, concluye el Obispo de Isiro-Niangara.
En las últimas semanas los rebeldes del LRA atacaron diversas localidades al noreste del Congo, en un área limítrofe con el sur de Sudán. Los rebeldes ugandeses se mueven desde hace años en una vasta área que comprende el noreste de la RDC, el sur de Sudán y la parte oriental de la República Centroafricana. Luego de la fallida ofensiva de diciembre del 2008 conducida por los ejércitos congoleses, ugandeses y de Sudán del sur contra el cuartel general del LRA en los bosques congoleses de Garamba, los guerrilleros se dividieron en pequeños grupos que realizan represalias contra los civiles. Según parece, el líder del LRA, Joseph Pony, sobre quien pesa una orden de captura de la Corte Penal Internacional, estaría refugiado en República Centroafricana, donde es buscado por los comandos ugandeses que actúan con el consentimiento de las autoridades locales. (L.M.) (Agencia Fides 18/12/2009; líneas 23, palabras 342)