Colombo (Agencia Fides) - El Tribunal Supremo de Sri Lanka ha dictaminado que el expresidente de Sri Lanka Maithripala Sirisena y otros cuatro altos funcionarios fueron negligentes ya que, a pesar de las advertencias de inteligencia bien fundadas, no tomaron las medidas preventivas necesarias para contrarrestar los ataques terroristas del Domingo de Pascua, 21 de abril de 2019, en los que murieron 279 personas.
En una sentencia histórica, emitida hoy 13 de enero, el tribunal ha dictaminado que Sirisena es específicamente responsable por no haber intentado impedir los atentados, en los que se produjeron ataques suicidas coordinados contra hoteles e iglesias católicas, resultando heridas más de 500 personas. Sirisena, de 71 años, ha sido condenado a pagar una indemnización de 100 millones de rupias (273.000 dólares) a las familias de las víctimas que han presentado la demanda. Junto a él, han sido declarados responsables y condenados a indemnizar a los familiares de las víctimas antiguos jefes de la policía, de los servicios de inteligencia y de defensa de Sri Lanka.
Es la primera vez que se responsabiliza a un jefe de Estado de Sri Lanka por no haber impedido un atentado terrorista. El veredicto ha generado una amplia satisfacción entre la opinión pública de Sri Lanka. La comunidad católica del país ha criticado desde el principio la inadecuada investigación del gobierno sobre los atentados de Semana Santa y ha solicitado a las Naciones Unidas una investigación internacional.
El cardenal Malcolm Ranjith, arzobispo de Colombo, ha instado en repetidas ocasiones al gobierno y a las instituciones estatales a cumplir su compromiso de garantizar justicia a las víctimas y “limpiar el país de todos los elementos de terror”. Casi cuatro años después de los atentados, que causaron muerte y destrucción, especialmente entre la comunidad cristiana, las investigaciones han resultado insuficientes y no se han aplicado las recomendaciones de la Comisión Presidencial de Investigación creada especialmente para la ocasión. Obispos, sacerdotes y laicos católicos han pedido transparencia y han apoyado el recurso judicial, llamado a determinar la posible responsabilidad del gobierno o de personas en posiciones de poder. En las últimas semanas, el cardenal había afirmado con dolor que “hasta hoy no se ha hecho justicia con ellos, lo que demuestra que hay hombres que no han sido procesados por el mal que han hecho”.
“Como Iglesia católica siempre hemos pedido y seguiremos pidiendo verdad y justicia, que se rindan cuentas. Debemos comprender a los instigadores y los objetivos no declarados de esos ataques”, señala a la Agencia Fides el padre Basil Rohan Fernando, sacerdote de la archidiócesis de Colombo y Director Nacional de las Obras Misionales Pontificias en Sri Lanka. “Es una medida necesaria -continúa- mientras nuestro pueblo sufre una de las peores crisis económicas de su historia. En los últimos años hemos estado cerca de las familias de las víctimas de los atentados y seguimos intentando apoyarlas en este difícil camino de recuperación”.
(PA) (Agencia Fides 13/1/2023)