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Islamabad (Agencia Fides) - Un plan de acción mundial para mejorar las condiciones de las minorías religiosas, promover sus derechos, garantizar vida y seguridad es lo que el católico Paul Bhatti, Asesor Especial del Primer Ministro para los Asuntos de las Minorías Religiosas y hermano del asesinado ministro Shabhaz Bhatti. El plan, dijo a Fides Paul Bhatti, se inspira y tiene la intención de continuar la misión de Shabhaz, y se basa en algunos supuestos básicos para asegurar a las minorías: educación, apoyo legal, seguridad, eliminación de leyes discriminatorias, protección real de las libertades y de los derechos ciudadanía.
El plan de Bhatti se produce en un momento delicado en la política paquistaní, después de la supresión del Ministerio Federal para las minorías religiosas. El gobierno de Pakistán, junto con la abolición, se ha comprometido a establecer un nuevo ministerio federal ("para la armonía y los derechos humanos"), que habría absorbido y mantenido a nivel federal parte del antiguo ministerio (ver Fides 2/7/ 2011). Pero esto, cuentan fuentes de Fides, aún no ha sucedido. En este contexto, Paul Bhatti como asesor especial y como líder de la "Alianza deTodas las Minorías de Pakistán" (APMA) ha desarrollado su línea de acción, delineando el futuro de las minorías religiosas en Pakistán: una línea que se quiere presentar al Primer Ministro y que compartió en exclusiva con la Agencia Fides.
Bhatti comienza señalando las principales razones que generan el sufrimiento de las minorías religiosas en Pakistán: los gobiernos inestables (34 años de dictadura militar y 29 gobiernos civiles en 63 años de independencia); leyes discriminatorias (como la de la blasfemia); crecimiento del extremismo religioso y del terrorismo; pobreza; analfabetismo y escaso acceso a la educación.
Para contrarrestar estos problemas, que impiden el desarrollo de las minorías y limitan los derechos, Bhatti propone una serie de pasos básicos: "A nivel local, es necesario fomentar las actividades culturales para difundir una cultura de tolerancia; reunir periódicamente a los líderes religiosos y de la sociedad civil; lanzar iniciativas de diálogo para mitigar la discriminación y la violencia contra las minorías; imponer restricciones y sanciones a los discursos o publicaciones que incitan al odio ya la intolerancia". Un trabajo específico, entonces, debe tocar la educación y la ley: "Debemos alentar al Estado a impartir una educación religiosa en el currículum escolar, que hable de todas las religiones de la misma manera; urge poner en marcha programas específicos para promover la educación de los miembros de las comunidades minoritarias". En términos legales "es necesario modificar o abolir leyes y prácticas discriminatorias que afectan a las minorías, y se debe proporcionar asistencia jurídica y financiera a los que son víctimas", asegurando el funcionamiento de la justicia y la equidad para los ciudadanos no musulmanes, y al mismo tiempo , "ofrecer ayuda y refugio a los que están en peligro o bajo amenaza".
Bhatti, recordando y haciendo suyas las ideas de su hermano, afirma necesidad de una presencia activa en la política de los líderes de las minorías religiosas para defender sus derechos: "Necesitamos por lo menos cuatro escaños reservados para las minorías en el Senado y, a nivel ocupacional, la reserva del 5% a los líderes de las minorías en todos los servicios públicos federales. El gobierno también debe celebrar con énfasis el 11 de agosto, Jornada de las Minorías de Pakistán, y respetar las fiestas religiosas más importantes, promoviendo encuentros entre los líderes de la mayoría y líderes de las minorías, especialmente en las áreas críticas". Todo esto, dice Bhatti Fides, será posible si " en Pakistán regirán las instituciones democráticas: por eso pedimos el apoyo de la comunidad internacional, para crear una nación donde se respeten la paz, la libertad religiosa, la la convivencia civil y la dignidad humana". (PA) (Agencia Fides 11/7/2011)
