Islamabad (Agencia Fides) - El Parlamento Federal de Pakistán ha aprobado una resolución que enfrenta y condena la grave práctica de los "linchamientos masivos", recientemente resaltada por varios incidentes en Sargodha (véase Fides 27/5/2023) y Peshawar (véase Fides 21/6/2024). La resolución, aprobada el 23 de junio, enfatiza la importancia de hacer respetar el Estado de derecho y destaca la urgencia de proteger a las minorías. Este paso legislativo significativo ha sido aclamado en los medios de comunicación pakistaníes como un avance crucial para combatir la violencia y garantizar la seguridad y los derechos de todos los ciudadanos.
La resolución, impulsada por el ministro de Justicia, Azam Nazeer Tarar, subraya que el derecho a la vida es el más fundamental de los consagrados en la Constitución de Pakistán. "Toda persona debe ser tratada de acuerdo con la ley y no de otro modo", reza el texto. El Parlamento ha expresado su profunda preocupación por los linchamientos de ciudadanos acusados de delitos de blasfemia en Swat y Sargodha, señalando con alarma que tales incidentes van en aumento. "Estas acciones no pueden tolerarse en ninguna sociedad civilizada", ha declarado el ministro.
El texto insta tanto al gobierno federal como a los provinciales a garantizar la seguridad de todos los ciudadanos, incluidas las minorías religiosas y otros segmentos vulnerables de la sociedad, y pide medidas inmediatas para identificar, investigar y procesar a los implicados en estos incidentes. La resolución ha recibido el apoyo de todas las fuerzas políticas y exige medidas estrictas para impedir los linchamientos masivos y frenar el uso indebido de las leyes contra la blasfemia, salvaguardando vidas inocentes.
Durante el debate parlamentario, el ministro federal de Planificación y Desarrollo, Ahsan Iqbal, ha destacado que no se trataba de incidentes aislados, sino de una preocupante serie de actos violentos cometidos en nombre de la religión. El ministro de Defensa, Khawaja Muhammad Asif, ha reiterado esta posición, instando a la Asamblea Nacional a adoptar una postura clara sobre la cuestión. El ministro de Justicia, Azam Nazir Tarar, junto con otros legisladores, ha contribuido decisivamente a la redacción y presentación de la resolución, reiterando el compromiso del gobierno con la justicia y la protección de los derechos humanos.
El 24 de junio, el Parlamento Regional del Punjab ha presentado y aprobado por unanimidad una resolución similar. El texto condena enérgicamente los incidentes de blasfemia y pide protección para todos los ciudadanos. La resolución, impulsada por la diputada musulmana Raheela Khadim Hussain, de la Liga Musulmana de Pakistán-Nawaz, afirma que "los incidentes de violencia por presunta blasfemia son extremadamente preocupantes y no pueden tolerarse ni quedar impunes". En su intervención, el presidente de la Asamblea de Punjab, Malik Muhammad Ahmed Khan, ha afirmado que este tipo de violencia y linchamientos masivos constituyen una flagrante violación de la Constitución, que garantiza los derechos de todos los ciudadanos.
Ambas resoluciones, la nacional y la regional del Punjab, han recibido el respaldo de varios parlamentarios, incluidos diputados cristianos. Su apoyo y compromiso con esta causa ha sido crucial para destacar la violencia colectiva y proteger a las comunidades vulnerables.
Según las organizaciones de la sociedad civil paquistaní, "este es un paso significativo en el contexto actual para promover la justicia y la igualdad en el país. Los políticos han empezado a debatir esta ley en el Parlamento, y su valentía debe ser apreciada. Cada vez hay más conciencia de que hay que poner fin a los continuos abusos de la ley de blasfemia, y esta resolución es una luz de esperanza de que este debate no se detendrá aquí, sino que se encontrarán soluciones concretas para salvar vidas inocentes", subraya Nasir Saeed, director de la ONG Centre for Legal Aid, Assistance and Settlement (CLAAS). "Estas resoluciones allanan el camino para reformas jurídicas más amplias que, esperamos, se traduzcan en cambios tangibles sobre el terreno, garantizando el respeto de los derechos de todos los ciudadanos. El gobierno y los legisladores tienen ahora la tarea de aplicar eficazmente estas resoluciones y trabajar por una sociedad más justa e inclusiva", concluye.
Mientras tanto, en Peshawar, en la provincia septentrional de Khyber Pakhtunkhwa, la policía ha abierto una investigación sobre cientos de personas que atacaron una comisaría y asesinaron a un hombre sospechoso de profanar el Corán. Gracias a los vídeos difundidos en las redes sociales, la policía está intentando identificar a las personas que el 20 de junio atacaron e incendiaron la comisaría de Madyan, un popular destino turístico de la provincia de Khyber Pakhtunkhwa, linchando a Mohammad Ismail, el hombre acusado de cometer blasfemia. Hasta el momento, la policía no ha detenido a ninguno de los agresores.
(PA) (Agencia Fides 25/7/2024)