ASIA/PAKISTÁN - “Pico de violencia contra las minorías religiosas", señala el "Estado de los Derechos Humanos 2011”

Islamabad (Agencia Fides) – “Pocos acontecimientos positivos y muchos signos preocupantes para las minorías religiosas en Pakistán", afirma el informe "Situación de los Derechos Humanos 2011", publicado por la “Comisión de Derechos Humanos de Pakistán", una de las mayores organizaciones no gubernamentales existentes en el país. El texto traza un panorama inquietante sobre la libertad de conciencia y de religión, y la condición de las minorías, afirmando que, según todos los indicios, "la situación podría deteriorarse aún más”.
Analizando los incidentes del 2010, el Informe señala que "los miembros de las minorías religiosas han sido víctimas de terribles actos de violencia a causa de su fe. La violencia y la intimidación han aumentado la sensación de inseguridad en todas las comunidades”. Durante el año, han muerto 99 fieles Ahmadi (considerada una "secta Islámica") mientras que episodios de violencia a gran escala también se han producido contra los cristianos, especialmente en el Punjab. Lo que preocupa a la Comisión es la impunidad de la que siguen gozando los instigadores y perpetradores de la violencia: "La retórica sobre la protección de las minorías abunda, pero en la práctica se hace muy poco. Parece que los esfuerzos para asegurar la convivencia pacífica y la armonía no son una prioridad", indica el texto.
Una de las herramientas de la opresión es la "ley sobre la blasfemia", de la cual se está pidiendo la eliminación: el abuso de la ley ha afectado a 64 personas en 2010, culminando con la ejecución extrajudicial de dos hermanos cristianos, Sajid y Rashid Emmanuel, asesinados en julio de 2010 en Faisalabad.
La propagación del extremismo islámico ha provocado un deterioro progresivo de los derechos humanos en el país, con graves repercusiones sobre las comunidades hindú y sikh, víctimas, junto con los cristianos, de una propaganda de odio que está en la base ideológica de la violencia.
Según las cifras proporcionadas por el Informe, más de 2.500 personas han muerto en Pakistán en 2010, en 67 atentados y ataques con explosivos, signo de un creciente clima de intolerancia y de la libertad de acción del terrorismo que las autoridades deberían detener. (PA) (Agencia Fides 15/4/2011)