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Lahore (Agencia Fides) – Asia Bibi, desde su celda de aislamiento en la prisión de Sheikhupura, en Punjab, ha expresado su "dolor y preocupación por la muerte del Ministro Shahbaz Bhatti". Lo dice a Fides su abogado, que la ha visto ayer. Asia está triste por la muerte de una persona que "como el gobernador Taseer, la ha defendido exponiéndose públicamente, y ha pagado con sus vidas". El abogado, contratado a través de la “Masihi Foundation”, que ofrece asistencia legal a Asia, señala a la Agencia Fides: "Asia, dice que una parte de sus esperanzas han muerto con Bhatti, pero hay otros elementos que la ayudan a seguir esperando: el apoyo de todos los cristianos en Pakistán y en todo el mundo; la visita de sus hijos, que ha sido posible después de los problemas burocráticos, en estos días”.
Asia todavía tiene miedo, ya que podría ser el próximo objetivo de los grupos radicales islámicos: cerca de la cárcel de Sheikhupura han aparecido imágenes con la figura de Taseer, y de Bhatti con un gran signo de interrogación, acompañadas de la frase intimidatoria: "¿Quién será la próxima?".
Los Abogados de Asia refieren a la Agencia Fides que, dadas las tensiones actuales, es preferible dar tiempo antes de iniciar el proceso de apelación. Y junto con todos los abogados cristianos de Punjab, reiteran la urgencia de defender a las minorías religiosas en Pakistán y de proteger el "estado de derecho”
La “Christian Lawyers Association in Pakistan” (CLAP) ha organizado una manifestación pública en Lahore ayer, marchando desde el Palacio de la Corte Suprema hasta el Palacio del Parlamento de Punjab, implicando también a Asma Jahangir, la mujer del Presidente del Colegio de Abogados de la Corte Suprema
El Presidente de la CLAP, Akbar Munawar Durrani, ha recordado que el asesinato de Bhatti es un testimonio trágico del terrorismo y el extremismo que causan estragos en todo el país y ha pedido: la abolición de todas las leyes discriminatorias; la prohibición de las publicaciones que alimentan el odio contra las minorías religiosas; la persecución legal de los líderes radicales islámicos que han pedido públicamente el asesinato de exponentes de las minorías religiosas, porque eran favorables a la revisión de la ley sobre la blasfemia
"Es evidente que en la raíz de tal persecución está la ley sobre la blasfemia: vamos a seguir pidiendo su derogación", ha afirmado Centre for Legal Aid, Assistance and Settlement” (CLAAS) con sede en Londres, que defiende a muchas víctimas inocentes acusadas de blasfemia en Pakistán. (PA) (Agencia Fides 8/3/2011)
