Hanoi (Agencia Fides) – El nuevo año trae nuevas esperanzas para la Iglesia en Vietnam: lo testimonian el nombramiento del representante pontificio no-residente para Vietnam, Su Exc. Mons. Leopoldo Girelli, (que también será Nuncio apostólico en Singapore, delegado apostólico en Malasia y en Brunei) y la visita reciente del Card. Ivan Dias, Prefecto de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos, que ha viajado a Vietnam para la clausura del Jubileo de la Iglesia local.
Se trata de acontecimientos que contribuirán “a la gradual normalización de las relaciones diplomáticas entre la Santa Sede y la República Socialista de Vietnam” y ofrecen “nuevas y concretas señales positivas para la visa de la Iglesia en el país”, comenta una fuente de Fides de la Iglesia vietnamita.
El acuerdo para el representante pontificio no residente es un paso adelante decisivo. Mons. Girelli podrá visitar con cierta continuidad a las comunidades católicas. Su presencia servirá para expresar el amor y la preocupación pastoral del Santo Padre a los fieles vietnamitas, que podrán advertir la cercanía del Papa en sus problemas, sintiéndose alentados y consolados en las dificultades. La Iglesia vietnamita obtendrá un gran beneficio y podrá mirar al futuro con renovada fe y esperanza.
La visita a Vietnam del Cardenal Ivan Dias, Prefecto de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos, Enviado Especial del Santo Padre para la clausura del Jubileo de la Iglesia local, también ha dejado en los fieles vietnamitas "un recuerdo de gratitud y alegría que guardarán durante mucho tiempo en sus corazones”. El Cardenal recordó que "el Papa ama Vietnam y al pueblo vietnamita”.
La visita se llevó a cabo bajo la mirada de la Virgen María, que protege y custodia al pueblo vietnamita: el Cardenal se dirigió al Santuario de Lavang, donde la Virgen se apareció por primera vez en 1798. Aquí bendijo una nueva estatua de la Virgen y la primera piedra para el nuevo santuario, autorizado por el gobierno: esto también es un signo alentador para toda la Iglesia.
El Cardenal Dias también se ha reunido con el Primer Ministro Nguyen Tan Dung, y ambas partes se han mostrado de acuerdo en "dar un nuevo impulso para la mejora de las relaciones entre la Santa Sede y Vietnam." Hoy, a la luz de estos recientes acontecimientos, hay grandes expectativas entre los fieles vietnamitas, junto con un gran optimismo y una nueva esperanza para la vida pastoral de la comunidad de 6 millones de católicos. La Iglesia vietnamita, por su parte, muestra una vitalidad, un dinamismo interior y un celo misionero que abren amplios horizontes para el futuro (PA) (Agencia Fides 24/1/2011)