ASIA/FILIPINAS - Espera y esperanza por la suerte del misionero secuestrado

viernes, 16 octubre 2009

Pagadian (Agencia Fides) – “El comité civil-militar que se ocupa del rapto del p. Sinnott está funcionando bastante bien, en parte gracias al trabajo de inteligencia. Tenemos confianza. Hay desarrollos positivos en este caso, pequeños pasos, aunque todavía no hay un contacto directo con los secuestradores. Nos estamos poniendo en acción buscando la colaboración de toda la población para establecer un canal y enviarle las medicinas que necesita el misionero. Esperamos que pronto este caso pueda concluir bien”: es lo que afirmó en diálogo con Agencia Fides el P. Gilbert Hingone, Vicario General de la diócesis de Pagadián, miembro del comité restringido de las autoridades eclesiásticas que, en colaboración con la Unidad de crisis instituida por el gobierno filipino, están trabajando por la liberación del P. Michael Sinnott, misionero de San Columbano, secuestrado el domingo 11 de octubre en Pagadián, en la isla de Mindanao, en las Filipinas del Sur.
El Obispo de Pagadián, Su Excelencia Mons. Emmanuel Cabajar, mientras tanto, ha escrito un nuevo mensaje a la comunidad, que será publicado y leído el próximo domingo 18 de octubre en todas las Misas de la Diócesis. El mensaje invita a los fieles a la oración y a cooperar en todas las formas posibles con las autoridades.
Según las últimas noticias difundidas por las autoridades filipinas, los militares han localizado con precisión la presencia del P. Sinnott en la provincia de Lanao del Norte. Probablemente llegó a los secuestradores uno de los volantes distribuidos por la unidad de crisis, que contiene los números telefónicos de contacto y, según parece, se ha logrado algunos contactos con el objeto de hacer llegar las medicinas al misionero. Los militares afirman tener bajo estricto control el área en la que se encuentra el P. Sinnott. La banda habría llevado al rehén a una zona controlada por los militares del Moro Islamic Liberation Front, que estaría mediando para la liberación del sacerdote.
El General Benjamín Dolorfino, jefe del Comando de Mindanao Occidental, también confirmó que la banda de secuestradores es un grupo de piratas dirigidos por el prófugo Guingona Samal, sumamente conocido en la península de Zamboanga por otros crímenes precedentes y por secuestros con fines de extorsión.
“No están previstos blitz por parte de las fuerzas especiales para la liberación del religioso”, afirmó el General. “Recorreremos todos los caminos posibles de negociación, pues queremos dar la posibilidad a una solución pacífica al asunto”, concluyó. (PA) (Agencia Fides 16/10/2009; líneas 30, palabras 409)


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