Yakarta (Agencia Fides) - La población indonesa de Sumatra está todavía movida y aterrorizada, después del terremoto que golpeó a la isla el día de ayer, 12 de septiembre, y después que la Agencia di meteorología indonesa comunicó que se alzó el nivel de alerta de tsunami por los numerosos movimientos que han afectado la zona oeste de la isla indonesa. Se trata de la cuarta alerta tsunami en menos de 24 horas. La Agencia declaró que la sacudida ha sido de 6,7 grados en la escala Richter. Según un balance provisional, los muertos causados por el terremoto serían 6 y los heridos 11. Pero la alerta de los sismólogos permanece alta dada la posibilidad de ulteriores movimientos de la costra terrestre, sin poder preverse la entidad de los mismos.
Se ha encendido de nuevo, así, la pesadilla entre la población de una ola anómala semejante a la que el 26 de diciembre de 2004 asesinó a cerca de 168.000 indonesios. El archipiélago indonesio está situado sobre la así llamada “cintura de fuego”, una zona del Océano Pacífico donde chocan las placas tectónicas, provocando frecuentes sismos y erupciones volcánicas muy violentas.
El tsunami es una serie de olas que se originan de los terremotos, terremotos submarinos, actividad volcánica, desprendimientos, impactos de meteoritos en el mar o cerca de ese. La energía de un tsunami es constante, en función de su altura y velocidad. Cuando la ola se acerca a la tierra, su altura aumenta mientras disminuya su velocidad. Las olas viajan a velocidades elevadas, más o menos sin ser notables cuando atraviesan las aguas profundas, pero su altura puede crecer hasta más de 30 metros cuando llegan la línea costera. (PA) (Agencia Fides 13/9/2007 líneas 18 palabras 288)