Leveque (Agencia Fides) – Tres mujeres sordas, madres de familia, han sido encontradas muertas en la carretera que va desde la capital de Haití a Leveque. Volvían a casa a pie juntas porque un puente se había derrumbado y no había servicio de autobús. Sus cuerpos fueron encontrados en la mañana de ayer, 26 de abril en una zanja al lado de la carretera. Fueron golpeadas, apuñaladas y quemadas. Los parientes que las han identificado en la morgue han referido que también les habían cortado la lengua, en un acto ritual bárbaro.
En Haití, según expertos observadores, las personas con algún tipo de discapacidad siguen siendo estigmatizadas, marginadas, a menudo abandonadas, consideradas como contagiosas o fuente de maldiciones, según la superstición deben ser castigadas a veces con crueldad terrible. Las mujeres y niñas con discapacidad son especialmente vulnerables. La nota enviada a la Agencia Fides por una fuente local, informa que después del asesinato, la indignación es particularmente fuerte en la ciudad de Leveque, donde las víctimas vivían en una comunidad de 168 familias de personas sordas, desplazados por el terremoto de 2010, que fue fundada por organizaciones religiosas que les proporcionan asistencia.
Aunque Haití posee una ley para la protección de las personas con discapacidad, nadie la aplica. Las personas con discapacidad tienen pocas oportunidades de trabajo y muchas viven escondidas en sus hogares. Algunos padres pobres abandonan a sus hijos con discapacidad entregándolos a las instituciones estatales o religiosas, o tratan de colocarlos en el servicio doméstico en otras familias. (CE) (Agencia Fides, 27/04/2016)