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Singapur (Agencia Fides) - La visita del Papa Francisco a Singapur, cuarta y última etapa de su largo Viaje Apostólico a Asia y China, está en pleno desarrollo. Por la mañana ha tenido lugar la ceremonia de bienvenida en la Parliament House de la ciudad-estado. Tras la Guardia de Honor, la ejecución de los himnos y los Honores a las Banderas, tuvo lugar la presentación de las Delegaciones y la «Orchid Naming Ceremony». Es decir, una nueva orquídea híbrida, naturalmente de color blanco, creada especialmente para esta visita, ha recibido el nombre de «Papa Francisco». A continuación se ha procedido a la Firma del Libro de Honor. «Como la estrella que guió a los Reyes Magos, así la luz de la sabiduría guíe siempre a Singapur en la construcción de una sociedad unida capaz de transmitir esperanza», las palabras escritas por el Pontífice que, tras el encuentro y la foto oficial con el Presidente de la República y después con el Primer Ministro, se ha dirigido a la National University of Singapore para el encuentro con las Autoridades locales y el Cuerpo Diplomático. A continuación reproducimos los pasajes clave:
La de Singapur es una historia de crecimiento y resiliencia.
Es importante que Singapur no sólo haya prosperado económicamente, sino que se haya esforzado por construir una sociedad en la que la justicia social y el bien común se tengan en gran estima.
Reconozco y alabo las variadas políticas e iniciativas puestas en marcha para sostener a los más débiles, y espero que se preste una particular atención a los pobres, a los ancianos —cuyos esfuerzos han plantado los cimientos del Singapur que hoy conocemos— y también para tutelar la dignidad de los trabajadores migrantes, que tanto contribuyen a la construcción de la sociedad, y a quienes hay que garantizarles un salario justo.
Las sofisticadas tecnologías de la era digital y el rápido desarrollo en el uso de la inteligencia artificial, no pueden hacernos olvidar que es esencial cultivar relaciones humanas reales y concretas; y que estas tecnologías pueden aprovecharse precisamente para acercarnos unos a otros, propiciando la comprensión y la solidaridad, y no para aislarnos de manera peligrosa en una realidad ficticia e intangible.
Singapur es un mosaico de etnias, culturas y religiones que conviven en armonía. El respeto recíproco, la colaboración, el diálogo y la libertad de profesar las propias creencias, acatando la ley vigente, son requisitos para un desarrollo equilibrado y sostenible.
La Iglesia católica en Singapur, ha promovido constantemente el diálogo interreligioso y la colaboración entre las distintas comunidades de fe, con espíritu de apertura y respeto recíproco, actitudes fundamentales para la construcción de una sociedad que sea justa y pacífica.
Singapur tiene asimismo un papel específico que desempeñar en el orden internacional -no olvidemos esto-, un orden que hoy se halla amenazado por conflictos y guerras sangrientas, y me alegra que con gran mérito haya promovido el multilateralismo y un sistema basado en normas comunes para todos. Los animo a continuar trabajando por la unidad y la fraternidad del género humano, en beneficio del bien común de todos, de todos los pueblos y de todas las naciones, con un espíritu que no sea excluyente ni se centre únicamente en los intereses nacionales.
Quisiera recordar también el papel que desempeña la familia, el primer lugar donde cada uno aprende a relacionarse con los demás, a ser amado y a amar. En las condiciones sociales actuales, los cimientos sobre los que se asientan las familias se ponen en discusión y corren el riesgo de quedar debilitados. Es necesario que se establezcan las condiciones para que las familias puedan transmitir los valores que dan sentido y forma a la vida, y enseñar a los jóvenes a entablar relaciones sólidas y sanas.
No podemos esconder el hecho de que hoy vivimos una crisis ambiental. Vuestra ubicación exclusiva les ofrece acceso a capitales, tecnología y talentos, recursos que pueden guiar la innovación para cuidar la salud de nuestra casa común.
Vuestro compromiso por un desarrollo sostenible y por la preservación de la creación es un ejemplo a seguir, y su búsqueda de soluciones innovadoras para afrontar los desafíos ambientales puede animar a otros países a hacer lo mismo.
(F.B.) (Agencia Fides 12/9/2024)