Nueva Delhi (Agencia Fides) - La nación india, que el 19 de abril inicia su maratón electoral - un largo proceso en siete etapas para la elección del Parlamento federal, que concluirá el 1 de junio - no necesita acontecimientos o acciones culturales, sociales y políticas que aumenten las tensiones interreligiosas. Por este motivo, un grupo de sacerdotes, religiosos y laicos indios han protestado contra la proyección de la película titulada "La historia de Kerala", centrada en el tema de la llamada "love yihad". La expresión se refiere a la supuesta práctica -según algunos generalizada y urdida a propósito- de obligar a las mujeres de Kerala (hindúes y cristianas) a convertirse al Islam tras casarse con hombres musulmanes. La película cuenta supuestas historias de mujeres convertidas e incluso obligadas a unirse al Isis.
Un grupo de católicos ha protestado por el estreno de la película, escribiendo: "La película es claramente una propaganda creada para promover la narrativa del Hindutva (la deología nacionalista-religiosa que significa "hinduismo", y predica una India exclusivamente hindú, ed.) que intenta destruir la naturaleza secular de nuestro país", polarizando a la nación y desencadenando tensiones entre comunidades religiosas.
"La película -se afirma- está llena de mentiras, inexactitudes de los hechos y medias verdades; hasta el punto de que el director de la película ha admitido públicamente la mentira y ha tenido que corregir las cifras dadas como la de 32.000 niñas secuestradas y convertidas a sólo tres", explica el mensaje compartido con la Agencia Fides por el p. Joseph Victor Edwin SJ, firmante del texto, Director del "Vidyajyoti Institute of Islamic Studies" en Delhi, donde enseña las relaciones islámico-cristianas. "Más importante aún, esta es una película que va en contra de las enseñanzas de la Iglesia y en contra de la persona y el mensaje de Jesús", dice el grupo, señalando la responsabilidad de promover la paz y la armonía en la India, y recordando el llamamiento del Papa Francisco para promover el respeto a la diversidad y la paz.
La película ha sido difundida por una cadena nacional, lo que ha suscitado un acalorado debate. El movimiento juvenil católico de Kerala, en la diócesis de Thamarassery, al igual que la diócesis católica de Idukki, decidió proyectarla. El partido del Congreso y el gobernante Partido Comunista de la India en Kerala señalaron que la proyección "exacerbaría las tensiones comunitarias" en vísperas de las elecciones", alimentando la "maquinaria propagandística" del "partido Bharatiya Janata", que dirige el gobierno federal del líder Narendra Modi.
Según el grupo de religiosos católicos que la impugna, la película "siembra el odio, la intolerancia y los prejuicios, en lugar de difundir la paz, la compasión y la aceptación, que son los valores fundamentales del cristianismo".
La proyección de la película, se observa, inculca "emociones negativas y actitudes discriminatorias hacia personas de otras creencias" y no enseña a los espectadores, especialmente a los niños, el amor y el respeto por todas las religiones y culturas. "Tales acciones pueden tener efectos negativos en las generaciones futuras y en la sociedad en general, particularmente en el actual contexto político en el que el odio se utiliza como arma para socavar la sociedad india", se afirma, pidiendo a las comunidades católicas que "no fomenten el conflicto", sino que "hagan todo lo posible para promover el diálogo interreligioso, la reconciliación, la fraternidad, la armonía y la paz, recordando que está en juego el futuro del país".
Según la teoría de la "love jihad" (yihad del amor), los hombres musulmanes indios tienen como objetivo a las mujeres hindúes y cristianas para convertirlas al islam mediante la seducción, fingiendo amor, engañándolas para luego secuestrarlas, casarse con ellas y convertirlas al islam, como parte de una "guerra demográfica" más amplia de los musulmanes en la India. Se trata de una campaña que la Iglesia india siempre ha deplorado y rechazado.
(PA) (Agencia Fides 16/4/2024)