ASIA/TIMOR ORIENTAL - El Arzobispo de Dili al Presidente: es necesario respetar la Constitución, por una nación próspera y pacífica

Dili (Agencia Fides) - "Espero que el presidente electo vuelva a la Constitución del Estado, porque la Carta fundamental sirve de control de la capacidad de funcionamiento del país", ha dicho Mons. Dom Virgilio do Carmo da Silva SDB, Arzobispo de Dili, capital de Timor Oriental, expresando su optimismo de que el presidente electo pueda y deba respetar y apoyar la Constitución del país. Timor Oriental celebró la segunda vuelta de las elecciones presidenciales el 19 de abril. El líder independentista y premio Nobel José Ramos-Horta -ex presidente del país de 2007 a 2012- fue reelegido presidente de Timor Oriental. Las elecciones presidenciales del país se celebraron en dos fases, ya que ningún candidato obtuvo la mayoría de los votos en la primera ronda de votación, el 19 de marzo.
Según las autoridades electorales del estado, Ramos Horta fue el más votado en la segunda vuelta, con un 62,09%. Francisco Guterres, actual presidente del país, obtuvo el 37,91% de los votos. El nuevo presidente jurará su cargo el 20 de mayo, en el vigésimo aniversario de la nación más joven de Asia.
La Iglesia católica en Timor Oriental, una nación predominantemente católica, siempre ha sido una presencia de equilibrio y moderación. "Debemos inspirarnos siempre y mantenernos firmes en las referencias de la Constitución, promoviendo la disciplina en todos los residentes para convertir permanentemente nuestra nación en una sociedad pacífica, próspera y democrática", dijo el arzobispo Da Silva tras emitir su voto en Dili, con motivo del escrutinio. El Presidente, señaló, debe actuar "como una figura paterna para la gente del país y ser respetado por todos los grupos políticos".
“Como líder del país –dijo - no debe haber distinción en función de sus partidarios u opositores, sino que todos los ciudadanos deben verlo como su presidente, ya que es el líder de la nación”. El arzobispo salesiano felicitó al pueblo de Timor-Leste por su participación en las elecciones, tanto en la primera como en la segunda vuelta, esperando que "el nuevo presidente trabaje duro para sacar al país de la pobreza”.
“La expectativa común para el nuevo presidente es que, a pesar de ser elegido entre los candidatos de los partidos, una vez elegido, se convertirá en el presidente de todos los timorenses. De este modo, promovería la paz y la estabilidad, dejando de lado la inestabilidad, el caos y las crisis económicas”, ha explicado a la Agencia Fides Acacio Pinto, sociólogo timorense de Dili.
“Creo que las elecciones se desarrollaron pacíficamente y el pueblo eligió claramente a su presidente: fue una declaración clara, ya que Ramos Horta obtuvo el 62,09% de los votos", ha continuado Pinto. “El país acaba de recuperar la estabilidad política, a principios del año pasado, y la economía acaba de volver a crecer después de tres años de recesión y crecimiento negativo”. "El camino hacia la democracia - señala el analista - es un desafío, ya que los gobiernos deben luchar contra la pobreza generalizada, el desempleo y la corrupción”.
Según un reciente informe del Banco Mundial, cerca del 42% de los ciudadanos de Timor-Leste viven por debajo del umbral de la pobreza, un porcentaje que también es consecuencia de la época de la pandemia de Covid-19.
La nación se independizó de Indonesia en 2002 y tiene 1,3 millones de habitantes. Es el segundo país más católico de Asia (después de Filipinas), con cerca del 98,3% de la población bautizada.
(SD-PA) (Agencia Fides 22/4/2022)

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