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Akhil Thottathuvila
Ciudad del Vaticano (Agencia Fides) – “La larga emergencia de la pandemia nos ha robado muchas cosas, cuyo valor se ha mostrado precioso precisamente al verse privado de ellas. ¡También nos perdimos las fiestas patronales de 2020 y 2021! Sólo desde el primer semestre del presente curso académico hemos podido saborear, aunque con algo de inquietud, la normalidad de la vida universitaria”. Así ha saludado el padre Leonardo Sileo, OFM, a los participantes en la fiesta patronal de la Pontificia Universidad Urbaniana celebrada ayer, 30 de marzo.
La jornada, celebrada en la fiesta de la Anunciación del Señor, se iniciado con una Solemne Concelebración Eucarística presidida por el Gran Canciller, el Card. Luis Antonio Gokim Tagle en la Capilla del Pontificio Colegio Urbano.
El P. Sileo, que es rector de la Universidad Urbaniana, ha subrayado: “La fiesta de 2019, la última que se pudo celebrar, estuvo dedicada al Documento sobre la Fraternidad Humana para la Paz Mundial y la Convivencia Común, firmado en Abu Dhabi el 4 de febrero de 2019 por el Papa Francisco y el Gran Imán de Al-Azhar Ahmad Al-Tayyeb. El tema de la celebración de 2022 es ‘Hermanos todos, sin fronteras’. Cuando le pedí a Su Eminencia que nos hablara de la fraternidad universal soñada por el Papa Francisco, aún no había estallado esta horrible guerra en Ucrania, en suelo cristiano, en el corazón del continente europeo, cuyos pulmones espirituales son los dos pueblos de antigua fe cristiana”, ha dicho el Rector, haciéndose eco del discurso que el Papa pronunció con motivo de la entrega de la que él mismo definió como una “encíclica social”.
El P. Sileo espera que la universidad, “microcosmos del encuentro de los pueblos de la tierra, se convierta en el taller en el que se enseñe y aprenda el arte de la aspiración mundial a la fraternidad”.
Tras el saludo del Rector ha tenido lugar la ponencia del Cardenal Michael Czerny, S.J., Prefecto en funciones del Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral. “He aceptado con alegría la invitación a reflexionar con ustedes sobre la última Encíclica del Papa Francisco, a partir de la sugerente provocación del título que me han propuesto: «La fraternidad: ¿utopía o salvación?» - ha dicho el cardenal -. ¿Es una opción razonable para nosotros, hoy, seguir pensando ‘en utopías’? En otras palabras, traduciéndolo en el lenguaje del Papa Francisco, debemos preguntarnos: ¿sigue teniendo sentido invertir en una imaginación proyectual?”
“La cultura del encuentro – ha continuado el Card. Czerny - se convierte en el horizonte utópico compartido que permite arrancar al individuo de la soledad en la que lo confinan tanto el liberalismo clásico (el hombre solipsista e insolidario) como el colectivismo marxista (el hombre-masa no libre). Se trata de un proceso de integración destinado a convertir a la persona en protagonista de la amistad social, reconociendo que pertenece a un ‘pueblo’. En este sentido, la solidaridad aparece como un estilo de construcción de la historia, un ámbito vital donde la tensión y el conflicto pueden ser superados en la consecución de una unidad pluriforme: la unidad es superior al conflicto”.
“La liturgia de hoy nos impulsa a pedir la gracia de la vista espiritual para conocer a Dios en Jesús y en sus obras”, ha dicho por su parte el Card. Tagle comentando la celebración de la apertura del evento. “¿Qué veo? ¿Cómo lo veo?” han sido los puntos en los que se ha detenido a reflexionar el Gran Canciller. “¿Qué vieron en Él los críticos de Jesús? No es el hijo de Dios, sino un blasfemo que pretende ser igual a Dios. ¿Qué ve Jesús? El rostro de Dios, el Padre que cura, la Madre que no olvida a su hijo. Lo que ve hacer a Dios lo hace Él mismo. Ver y hacer van juntos. Recemos para que veamos lo que ve Jesús, para que veamos cómo ve Jesús, para que hagamos lo que vemos que hace Dios”, ha dicho para concluir el cardenal Tagle.
Durante el acto, junto con la entrega de premios a los estudiantes meritorios del curso 2020-2021, el Gran Canciller ha leído el decreto de aprobación del nuevo Reglamento de la Universidad (según los nuevos Estatutos) por parte de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos. Como se indica en los Estatutos, «la Pontificia Universidad Urbaniana ha sido fundada por la Sede Apostólica como Institución para el Estudio de las Disciplinas Eclesiásticas, con una orientación específica hacia la evangelización de los pueblos» (art. 1).
(AN/AP) (31/3/2022 Agencia Fides)
Akhil Thottathuvila
