Túnez (Agencia Fides) - “Los salafistas son pocos, pero se concentran en masa en los lugares en los que protagonizan sus protestas. En este sentido, causan impresión” dice a Fides el p. Jawad Alamat, Director Nacional de las Obras Misionales Pontificias (OMP) en Túnez, donde entre ayer y hoy, se han producido enfrentamientos entre la policía y grupos de salafistas que han atacado un tribunal, una comisaría de policía y bloqueado la carretera que une Túnez con Beja. La policía ha disparado gases lacrimógenos y arrestado a 46 personas.
“Hasta ahora, el partido islamista en el poder, Ennhada, ha adoptado la política del diálogo con los extremistas”, explica el padre Alamat. “La nueva clase dirigente de Túnez afirma que reprimir al movimiento salafista empeoraría la situación, ya que al hacerlo seria probable que atrajese la simpatía popular. Ennhada dice que hay que respetar las diferencias de opinión, pero que éstas no deben convertirse en una carga para los demás”.
Sin embargo, según el p. Alamat, “las acciones de los salafistas empiezan a ser impopulares, no sé hasta qué punto se podrá continuar el diálogo con los extremistas. Túnez además está haciendo un gran esfuerzo para atraer la inversión extranjera y el turismo. Las acciones de los salafistas podrían alejar ambas cosas, mientras que Túnez las necesita para revitalizar su economía”. “Por otro lado, cuanto más empeora la situación económica más fácil es para los Salafis reclutar nuevos seguidores, ya que su movimiento está bien financiado, especialmente por el extranjero”, dice el p. Alamat.
“Estoy seguro de que el pueblo tunecino que se rebeló contra la tiranía del régimen anterior, será capaz de hacer frente a un grupo, que aunque es violento, no deja de ser minoritario”, concluye el Director Nacional de las OMP en Túnez (L.M.) (Agencia Fides 12/6/2012)