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Kathmandu (Agencia Fides) – Existe una gran decepción e indignación en la comunidad cristiana en Nepal: el gobierno no concede a las comunidades cristianas terrenos para enterrar a sus difuntos en la zona de Katmandú, y los fieles cristianos, después de meses de espera, "están listos para convocar una manifestación llevando frente al Parlamento los ataúdes y urnas funerarias”, dice a la Agencia Fides el p. Pius Perumana, Pro-Vicario Apostólico de Nepal. El gobierno, explica el sacerdote, "está mostrando falta de certeza y ambigüedad y no ha resuelto un problema que afecta a la esfera de los derechos de los ciudadanos de fe cristiana y de otras minorías religiosas: el derecho a tener lugares designados para enterrar a sus muertos”.
Después de varias reuniones y promesas, las autoridades aún no han tomado una decisión: los hindúes se oponen a la concesión de un terreno (que es propiedad estatal), cerca del templo hindú de Pashupatinath. Mientras tanto, la cuestión empeora y los cristianos recurren a la cremación o entierran a sus muertos hacinados en tierras privadas. Los cristianos se quejan de la falta de respeto a sus derechos, en un estado que, habiendo abandonado la monarquía hindú en 2006, "hoy es laico y debe garantizar la igualdad de derechos para los ciudadanos de todas las religiones", señala el p. Pius. Por esta razón, algunos líderes cristianos protestantes han anunciado un programa de eventos y actividades públicas para sensibilizar ala población (incluidos budistas e hindúes) sobre el tema de los derechos de las minorías religiosas
A nivel político la situación en Nepal sigue estancada, ya que no hay acuerdo entre los partidos mayoritarios (los Maoístas, el Congreso y otros) para proponer un nuevo Primer Ministro. Mientras tanto, señala el pro-Vicario, "la Iglesia está experimentando un motivo bastante pacífico: la ausencia de violencia es beneficioso para la pastoral. Nos gustaría abrir nuevos centros pastorales en el norte y en el oeste del país, con pequeñas escuelas y clínicas móviles. Esto será posible gracias a las nuevas órdenes religiosas que solicitan venir a Nepal”. En esta etapa de la política nacional, mientras se debe redactar una nueva Constitución - que debería ser aprobada antes de finales de mayo - la Iglesia católica pide al Estado el pleno reconocimiento, que implica la personalidad jurídica y el derecho a poseer propiedades, escuelas e institutos. De los 30 millones de personas, los cristianos en Nepal son alrededor de 500 mil, de los cuales unos 10 mil son católicos. (PA) (Agencia Fides 1/2/2011)
