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Lilongwe (Agencia Fides) - "Hoy, 28 de marzo, se abre un encuentro de una semana de la Comisión por la revisión de la Constitución de la Malawi (Costitutional Review)" dice el P. Giorgio Gamba, misionero monfortino que trabaja en Malawi.
"Esta cita marca el inicio de una fase de importantes discusiones y cambios en la vida del País" continúa el misionero.
El 4 de abril en efecto se reabre el Parlamento, que quedará en sesión hasta el 28. Serán presentados a discusión doce proyectos de ley, la mayor parte de los cuales están en espera desde hace años. Entre estos la introducción del carné de identidad. Se trata de una novedad importante en un País sin registro de vecindad, que tendrá la posibilidad de dar a los propios ciudadanos por primera vez, un documento de identidad.
Está luego el Domestic Violence Bill, una ley promovida por las mujeres sobre la violencia sexual, sobre todo para frenar la violencia que sufren dentro de la familia. A esto se suma la reforma del Código Penal, que representaría un verdadero cambio en la estructura carcelaria, y que, junto a otra propuesta de ley para revisar el código de procedimiento penal, constituye una tentativa de modernizar la justicia local
Por fin el llamado "Money laundering bill" pretende frenar el reciclaje del dinero sucio
"El Parlamento ha botado una agenda de trabajo realmente fuerte pero permanece la duda de si logrará respetarla completamente" afirma el misionero. "La situación política en efecto continua tensa hasta el punto que el periódico "The Nation" ha dado por cierta la mediación que el Arzobispo de Blantyre, Mons. Tarcisius Gervazio Ziyaye, estaría realizando para hacer que se sienten en la misma mesa al Presidente y su Vicepresidente, cosa completamente desmentida por el Arzobispo."
En todo esto, Malawi continua sufriendo la grave carestía que viene sufriendo desde hace meses. "Mientras los primeros datos del hambre hablan de 300 niños muertos por desnutrición el mes pasado, con la nueva cosecha se abre la posibilidad de una vuelta a la vida cotidiana que planteará muchas preguntas sobre el pasado (en particular la mala gestión que se ha realizado de la emergencia hambre) y sobre el inmediato futuro ligado en particular a la apertura del mercado del tabaco. Normalmente era vendido en subasta. Los labradores piden que se establezca con antelación un precio mínimo, cosa que los compradores no han aceptado planteando un problema al País. Un estudio dice que si los labradores de Malawi recibieran el 10% del coste del producto terminado, el tabaco solo solucionaría el problema de la pobreza de Malawi. En occidente, el mercado internacional no aceptará nunca esta condición y Malawi continuará siendo el sexto país más pobre del mundo. Y también esta tarde el labrador que espera vender su tabaco y conseguir así algo de dinero a disposición después de meses de hambre, seguirá preguntándose cuando abre el mercado, y venderá a cualquier precio, visto que no tiene elección y no puede competir con quien puede esperar meses para comprar mientras el está con el estómago vacío” concluye el misionero. (L.M) (Agencia Fides 28/3/2006 Líneas: 38 Palabras: 539)
