Hanoi (Agencia Fides) - La música eleva el alma hacia Dios y tiene el poder de hacer vibrar las cuerdas del corazón humano. Por eso San Agustín decía que “el que canta reza dos veces”. Los fieles vietnamitas experimentan el gran poder espiritual de la música en la liturgia y por ello la Comisión de Música Sacra de la Archidiócesis de Hanoi ha reunido en un seminario a más de 300 representantes de los coros parroquiales de la Archidiócesis, en presencia de Mons. Joseph Vu Van Thien, Arzobispo de Hanoi, sacerdotes, religiosos y religiosas, músicos y animadores litúrgicos.
Según la información de la Agencia Fides, durante el seminario, celebrado en los últimos días en el Centro de Peregrinación de Bang So, en la capital de Hanoi, el P. Roch Nguyen Duy, músico y secretario de la “Comisión para la Música Sacra” de la Conferencia Episcopal de Vietnam, ha ayudado a los participantes a comprender la importancia de la música sacra: “La música sacra es un lugar sagrado del verdadero arte en el que se eliminan todos los elementos mundanos para entrar en la música especial de la liturgia”. Los miembros del coro – ha dicho- deben sentirse honrados de elevar sus voces en alabanza al Señor: “Sirven a la Iglesia con fe y participan plenamente en las celebraciones litúrgicas con la conciencia de que son miembros de la comunidad reunida y santificada por Jesucristo”.
El arzobispo Joseph Vu Van Thien ha afirmado: “La organización y la práctica del coro es un acto espiritual de unidad y amor. En las celebraciones litúrgicas, el coro canta los himnos según los principios de la teoría musical y de acuerdo con las normas de la Iglesia, para que las liturgias se desarrollen perfectamente, según las modalidades del culto”.
Paralelamente al evento de Hanoi, la Comisión Pastoral de Música Sacra de la Archidiócesis de Ho Chi Minh ha organizado en las últimas semanas el "Festival de Música Sacra 2022" en el Centro Pastoral de la ciudad de Ho Chi Minh, con la participación de sacerdotes, religiosos y religiosas, músicos y numerosos coros de las parroquias de la archidiócesis. En el Festival, los participantes han podido compartir sus pensamientos, sueños y preocupaciones sobre el ministerio del canto en la vida de la Iglesia. Monseñor Joseph Nguyen Nang, arzobispo de la ciudad de Ho Chi Minh, ha dicho para la ocasión: “Cantar un himno litúrgico no es como cantar una pieza de música popular. En la música sacra, el canto y la música son un ministerio: tanto el canto colectivo como el canto solista son parte integrante de la celebración litúrgica. Deben ayudar a elevar las almas de los fieles hacia Dios, y los propios cantantes están llamados a un auténtico amor a Dios y a una ferviente vida de fe”.
El arzobispo ha recordado que es importante rezar antes de cantar y también preparar bien el servicio, centrándose en la técnica pero también en el significado de los textos sagrados. “El objetivo es glorificar a Dios santificando la comunidad litúrgica, no para hacer alarde de talentos individuales, sino para que la comunidad de participantes pueda encontrarse con Dios”, ha añadido.
“En la liturgia, cada forma de arte tiene la tarea de llevar las almas de los fieles a Dios”, ha subrayado Mons. Louis Gonzala Nguyen Hung Vi, Presidente de la Comisión de Música Sacra de la Conferencia Episcopal de Vietnam. El P. Roch Nguyen Duy, Secretario de la Comisión, ha recordado a los compositores que deben "inspirarse en la Biblia y los Salmos, enriqueciendo así el patrimonio de la música sacra vietnamita".
La música sacra vietnamita se ha desarrollado de forma constante desde los años 40 y ha contribuido no sólo a alimentar la fe del pueblo de Dios, sino también a promover altos valores en la vida social y cultural. Varias generaciones de músicos, cantantes, orquestas y coros católicos han cultivado sucesivamente la música sacra vietnamita en una pluralidad de composiciones y estilos. La música sacra ha tenido un intenso efecto en la vida de fe del pueblo vietnamita: el compromiso de tanta gente en el canto de los himnos ha hecho más solemnes y vibrantes las celebraciones litúrgicas y los momentos de oración, contribuyendo a fortalecer la fe de los bautizados. Los cientos de miles de himnos litúrgicos existentes en lengua vietnamita son ahora una herramienta realmente útil para la evangelización.
(AD-PA) (Agencia Fides 10/6/2022)