VATICANO - “El diálogo con las otras religiones sigue siendo una prioridad, especialmente en las zonas del sur del país” recuerda el Papa al tercer grupo de Obispos de las Filipinas

viernes, 4 marzo 2011

Ciudad del Vaticano (Agencia Fides) – “El diálogo con las otras religiones sigue siendo una prioridad, especialmente en las zonas del sur del país” ha subrayado el Santo Padre Benedicto XVI en su discurso dirigido el 3 de marzo al tercer grupo de prelados filipinos, recibidos para la visita ad limina Apostolorum. “Mientras la Iglesia proclama siempre que Cristo es el camino, la verdad y la vida, – ha proseguido el Pontífice -, sin embargo, respeta todo lo verdadero y bueno de las otras religiones, y trata de entablar, siempre que sea posible, con prudencia y caridad, un diálogo honesto y amigable con sus seguidores. De este modo, la Iglesia trabaja para el entendimiento mutuo y la promoción del bien común de la humanidad. Os felicito por el trabajo que habéis hecho y os animo, a través del diálogo que habéis establecido, a seguir fomentando el camino hacia la paz verdadera y duradera con todos vuestros vecinos, sin dejar de tratar a cada persona, independientemente de su creencia, como ser creado a imagen de Dios”.
En su discurso el Santo Padre ha dado las gracias a los Obispos por la labor pastoral que desarrollan, y recordando las palabras de San Pablo - «Y no nos cansemos de hacer el bien, pues a su tiempo, si no nos cansamos, segaremos» (Gal 6, 9) -, ha remarcado que el Apóstol “nos presenta un doble imperativo, que es muy apropiado para vuestro ministerio en las islas del centro y sur del archipiélago de las Filipinas. Donde podéis esforzaos por hacer el bien entre los cristianos y entre los no cristianos".
Entre los compromisos prioritarios de los Obispos, el Papa ha destacado la importancia de la formación permanente de catequesis, sin olvidar la atención a las familias, especialmente a los padres “en su papel de primeros educadores de sus hijos en la fe”, y ha saludado a “las numerosas religiosas y catequistas laicos" que son colaboradores de los Obispos en esta importante labor. "De hecho, como Obispos diocesanos no afrontáis nunca un desafío solos – ha proseguido Benedicto XVI -, porque siempre estáis asistidos, sobre todo y en primer lugar, por vuestro clero”, y los ha exhortado a “conocer bien” a los sacerdotes y a guiarles “con sincera solicitud, mientras éstos deben estar siempre dispuestos a cumplir con humildad y fidelidad las tareas que se les encomiendan”. El Papa ha subrayado además la importancia de “la formación permanente para los sacerdotes jóvenes”, y la necesidad de promover, para los sacerdotes de todas las edades, “días de retiros espirituales y encuentros anuales así como programas de educación permanente y asistencia para los sacerdotes que puedan estar afrontando dificultades”. El Pontífice ha invitado a los Obispos a “aprovechar la celebración anual del jueves santo, en el que la Iglesia conmemora el sacerdocio de modo especial. De acuerdo con sus promesas solemnes en la ordenación, recordad a vuestros sacerdotes su compromiso a vivir el celibato, la obediencia, y una dedicación cada vez mayor al servicio pastoral”.
Por último Benedicto XVI, complaciéndose del hecho de que muchos filipinos asistan a la misa dominical, ha subrayado que el deber de los Obispos y el de sus sacerdotes, es de “no dejar de buscar a la oveja perdida, asegurándoos de que todos los fieles se vivifican en el gran don que se nos da en los sagrados misterios”. (SL) (Agencia Fides 4/03/2011)


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