ASIA/CHINA - La virtud teologal de la esperanza al centro de las “cartas de Adviento” de los Obispos de Hong Kong y Guangzhou

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Guangzhou (Agencia Fides) – La virtud teologal de la Esperanza sigue siendo el centro de las Cartas pastorales que los obispos chinos dirigen a sus comunidades diocesanas con ocasión del Adviento 2025.
El Cardenal Stephen Chow Sau-Yan, Obispo de la diócesis de Hong Kong, escribe en el inicio de su Carta de Adviento: «El Año Jubilar de la Esperanza está llegando a su fin. Pero la esperanza misma no termina. Y la esperanza es el espíritu mismo del Adviento». En el texto, el cardenal jesuita anuncia que en 2026 se celebrarán los ochenta años de la Erección de la diócesis de Hong Kong, y el tema que será hilo conductor de las celebraciones será el de «Portadores de esperanza». El 8 de diciembre, fiesta de la Inmaculada Concepción, se abrirá el año jubilar diocesano, que se extenderá durante todo 2026, mientras que en 2027 se celebrará la Asamblea diocesana dedicada a la reflexión y al discernimiento sobre el dinamismo sinodal de la Iglesia que camina por la vía del «diálogo en el Espíritu Santo».
En su Carta pastoral, estructurada en cinco capítulos, el Cardenal Chow explica que, cuando el amor de Dios actúa en nosotros, «somos tanto destinatarios de esperanza como llamados a ser sus mediadores: nos volvemos realmente portadores de esperanza».
Tras citar al Papa Francisco (Laudato Si’, Dilexit nos) y al Papa León XIV (Dilexi Te), el obispo de Hong Kong exhorta a sus «hermanos, hermanas y amigos a reconocerse llamados a convertirse en portadores de esperanza, no para nosotros mismos, sino los unos para los otros, especialmente para quienes luchan y cuya esperanza se ha debilitado».
El cardenal jesuita recuerda que «nuestro mundo necesita que el pueblo de Dios muestre la autenticidad del amor y de la esperanza a estas almas en dificultad. Si se dejan abrazar por el amor y por la esperanza hasta redescubrir la fuerza regeneradora que viene de Dios, entonces las heridas podrán ser sanadas».
Giuseppe Gan Junqiu, Obispo de la diócesis de Guangzhou, ha titulado su Carta pastoral para el Adviento 2025 «Esperamos que Jesús el Salvador descienda del cielo».
El obispo Gan insiste en que los cristianos no deben evadirse de la realidad ni buscar escapatorias, y tampoco sentir pánico al pensar en el fin de los tiempos. Mucho menos entregarse a la pasividad o a la resignación. Los bautizados están llamados, por el contrario, a manifestar su pasión por la vida, sembrando en las almas solitarias «la esperanza de la vida eterna».
La celebración del Adviento –añade el Obispo de Guangzhou– abre «un camino de esperanza, un camino de santificación». Esta esperanza «santifica nuestra vida y nos permitirá, en el retorno de Cristo, entrar en la bienaventuranza eterna junto a Lázaro, que un día soportó los sufrimientos de este mundo».
La espera del Retorno de Cristo –recuerda Giuseppe Gan– es la fuerza que «atrae y guía a los cristianos hacia la santificación», caminando en la esperanza unidos a María, Madre de la Esperanza.
(NZ) (Agencia Fides 01/12/2025)


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