ÁFRICA/NIGERIA - “Nigeria es una bomba de relojería”, asegura el presidente de la Conferencia Episcopal

lunes, 26 agosto 2024 jóvenes   violencia   obispos  

Abuja (Agencia Fides) - “Nigeria es una bomba de relojería”. Es la advertencia que ha hecho Lucius Ugorji, arzobispo de Owerri, presidente de la Conferencia Episcopal Católica de Nigeria, CBCN, en su discurso de apertura de la segunda Asamblea Plenaria de la CBCN, en Auchi, estado de Edo.

Refiriéndose a las recientes protestas de los jóvenes por la política económica del presidente Bola Tinubu, monseñor Ugorji aseguró que habrá nuevas manifestaciones si no se toman medidas para responder a sus demandas. “Mientras la nación siga sufriendo la pobreza y la corrupción y mientras el futuro de los jóvenes de nuestra nación siga siendo sombrío, seguiremos viendo estas protestas”.

El presidente del CBCN criticó a continuación la respuesta del gobierno federal y, en concreto, de “algunos funcionarios que, en lugar de combatir el mal, se dedican a pasar la patata caliente y buscar un chivo expiatorio”. “Nigeria es una bomba de relojería cuando, al mismo tiempo, las fuerzas de seguridad intentan aplacar las protestas y a sus partidarios con acusaciones falsas”, advirtió. “Nos preocupa que estén tratando de privar a los ciudadanos de sus derechos y libertades democráticas de protestar para dar la impresión de que todo está bien en el país y que realmente no había necesidad de protestar. Esto es delirante y condenable”, aseguró el obispo Ugorji quien pidió al presidente Tinubu que revise sus políticas económicas, subrayando que los nigerianos están sufriendo a consecuencia de ellas.

El movimiento de protesta #EndBadGovernance proclamó una huelga general en todo el país entre el 1 y el 10 de agosto (ver Fides 2/8/2024). Las protestas degeneraron en violencia, tanto por la infiltración de delincuentes entre los manifestantes pacíficos, como por la brutal reacción de la policía que provocó la muerte de al menos veinte personas, además de la detención de más de mil manifestantes. La mayor violencia se produjo en los estados del norte.

En Kano, donde la policía arrestó a unos 873 sospechosos, los agitadores que se hicieron pasar por manifestantes atacaron y destrozaron oficinas gubernamentales y saquearon propiedades privadas. Algunos de ellos también fueron sorprendidos ondeando banderas rusas mientras pedían el establecimiento de un gobierno militar en Nigeria. Una clara referencia a las juntas militares golpistas cercanas a Moscú, que se han instalado en Mali, Burkina Faso y Níger.

Según la prensa nigeriana, para octubre están previstas nuevas protestas. Las demandas de los líderes de #EndBadGovernance no se limitan a pedir el restablecimiento de los subsidios a los combustibles, así como abordar y resolver el aumento exponencial de los precios de los productos de primera necesidad. Entre las demandas se encuentran un salario mínimo para los trabajadores, reformas en la policía, considerada corrupta y violenta, y en el sistema judicial, considerado injusto y corrupto.
(L.M.) (Agencia Fides 26/8/2024)


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