Abuya (Agencia Fides) - Nigeria se prepara para 10 días de manifestaciones contra el alto coste de la vida y el desempleo, problemas que afectan a gran parte de la población. Las protestas que comienzan hoy, 1 de agosto, están promovidas por una serie de organizaciones de la sociedad civil y tienen como objetivo, sobre todo, presionar al presidente Bola Ahmed Tinubu para que revise una serie de reformas económicas de gran impacto en la vida de los ciudadanos comunes. En concreto, el precio de los alimentos ha aumentado un 40 por ciento y los precios del combustible se han triplicado desde que se introdujeron las medidas económicas de Tinubu para hacer frente a la deuda nacional.
La política económica del presidente Tinubu, que asumió el cargo en mayo de 2023, se ha enfrentado a una creciente oposición de amplios sectores de la sociedad. Los propios obispos de Nigeria han adoptado una posición dura a este respecto, a través de Lucius Iwejuru Ugorji, arzobispo de Owerri y presidente de la Conferencia Episcopal de Nigeria (CBCN). El obispo, en su discurso en la primera Asamblea Plenaria de la CBCN, aseguraba que “debido a las reformas gubernamentales, millones de nigerianos se han visto reducidos a una vida de pobreza extrema, sufrimiento increíble y dificultades indescriptibles como nunca antes en nuestra historia nacional” (ver Fides 19/2/2024).
Al promover las actuales manifestaciones, los nigerianos se inspiraron en el ejemplo de los kenianos que, con sus protestas, obligaron al presidente William Ruto a retirar la ley de finanzas y a realizar una importante reestructuración del gobierno (ver Fides 27/6/2024 y 31/7 /2024). Las protestas ahora circulan online usando los hashtags #EndBadGovernanceinNigeria y #RevolutionNow. El gobierno ha pedido a los ciudadanos que no participen en las manifestaciones, apelando al diálogo y la moderación. Se teme que se produzcan enfrentamientos y provocaciones por parte de grupos criminales que podrían empujar al caos y los saqueos. Los obispos de la provincia eclesiástica de Ibadan expresaron su preocupación a través de un comunicado que afirma que “las protestas deben llevarse a cabo para conseguir el objetivo previsto sin interrupciones innecesarias”. “A los manifestantes se les debe permitir expresar sus opiniones sin molestar a otros que decidan no participar”, concluyen.
Los obispos recuerdan también a los organizadores de las manifestaciones que tienen la responsabilidad de que las protestas sean pacíficas y no violentas. Al mismo tiempo, piden a las autoridades que respeten el derecho a manifestarse, que no debe impedirse mediante intimidación. Por último, piden al gobierno que responda con rapidez y eficacia a las preguntas de los nigerianos para que las protestas ya no sean necesarias.
(L.M.) (Agencia Fides 1/8/2024)