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Dakar (Agencia Fides) - "Se trata de protestas espontáneas de una población joven que carece de porvenir. Por el momento no hay grupos que organicen los disturbios", dice a la Agencia Fides el P. Bruno Favero, de los Misioneros Oblatos de María Inmaculada (OMI) de Dakar, capital de Senegal, donde ayer murieron dos personas en un ataque con un artefacto incendiario contra el autobús en el que viajaban.
Según el testimonio del conductor, un grupo de jóvenes encapuchados había abordado el vehículo en un suburbio popular, le había insultado y, a continuación, uno de ellos había lanzado un artefacto incendiario de fabricación casera.
El incendio provocado es sólo el último de los episodios más graves de los disturbios que asolan Senegal desde junio, tras la exclusión del candidato opositor Ousmane Sonko de las elecciones presidenciales de 2024.
“Sonko tiene muchos seguidores populares. Su exclusión de la vida política ha creado resentimiento entre sus partidarios y algunos de ellos han pasado a la acción con protestas espontáneas que han adquirido un carácter violento en algunos casos", explica el P. Bruno. "Son sobre todo los jóvenes de la periferia de las ciudades, empezando por Dakar, los que protestan", prosigue el misionero. " Se trata de jóvenes desempleados que no tienen perspectivas de futuro y viven al día. Son personas que pueden sentirse atraídas por la pequeña delincuencia, pero por el momento descartaría la posibilidad de que haya grupos detrás de la violencia. El atentado contra el autobús es un incidente muy grave, pero espero que sólo sea el resultado de la imprudencia criminal de quienes lo cometieron y no una señal de que hay formas de terrorismo en marcha", afirma el P. Bruno.
Tras quedar tercero en las elecciones presidenciales de 2019, Sonko defiende un programa "antisistema" centrado, en particular, en un reequilibrio de las relaciones con los países europeos, incluida Francia, que ha despertado el entusiasmo de los jóvenes
El 8 de mayo fue condenado a seis meses de prisión con suspensión de pena tras un juicio en apelación por difamación, sentencia que amenaza con convertirlo en inelegible. El 1 de junio fue condenado a dos años de prisión por escándalo sexual, condena que lo convierte en inelegible. Esta condena provocó los disturbios más graves de los últimos años en Senegal, con un balance de 16 muertos según las autoridades, y una treintena según la oposición.
Por último, el 31 de julio ha sido detenido, acusado de varios delitos, entre ellos el de llamar a la insurrección. Su partido, Pastef, ha sido disuelto por las autoridades.
Lo que ocurrirá ahora con la detención de Sonko sigue siendo objeto de especulación. Creo que puedo descartar una guerra civil por el momento", afirma el padre Bruno, "pero sin duda hemos entrado en un periodo incierto y difícil".
(L.M.) (Agencia Fides 2/8/2023)
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