Islamabad (Agencia Fides) - La policía de Pakistán ha arrestado a Khadim Hussain Rizvi, líder del partido radical islámico Tehreek-e-Labbaik Pakistan (TLP) quien organizó la protesta violenta, que paralizó a la nación, después del veredicto de absolución de Asia Bibi, la mujer cristiana que había sido condenada a muerte por presunta blasfemia. Rizvi había anunciado una nueva ola de protestas para el 25 de noviembre con el fin de “rendir homenaje a los mártires de su partido”.
Al comentar el arresto, el ministro de Información Chaudry Fawad Hussain ha declarado: “Mantener el orden público en el país es responsabilidad del estado, y no permitiremos que nadie lo destruya”.
Khadim Hussain Rizvi había realizado amenazas públicamente y emitido un fatwa (decreto religioso) contra los magistrados de la Corte Suprema que absolvieron a Asia Bibi.
“Asia Bibi fue acusada falsamente. El estado es responsable de salvaguardar las vidas de los ciudadanos. El caso de Asia Bibi no debería haber durado tanto. Es deber del estado garantizarle protección”, ha dicho Saqib Nisar, presidente de la Corte Suprema de Pakistán, el alto magistrado que presidió el colegio de jueces que absolvió a Asia Bibi el pasado 31 de octubre. El juez se dirigió a los miembros del Parlamento británico, durante una reciente visita a Londres con estas palabras: “Cada caso judicial es independiente: no existen casos de alto perfil o de bajo perfil. En Pakistán, la reforma judicial tiene la mayor de las prioridades: es urgente tomar medidas para reducir los retrasos en impartir justicia”, añadiendo que “la corrupción es uno de los problemas más importantes”.
El examen del caso de Asia Bibi en los tribunales sufrió retrasos en varias ocasiones debido a la presión de los grupos militantes islámicos. Los jueces, en los tres niveles de juicio, recibieron amenazas y algunos de ellos se negaron a fijar una fecha para la audiencia.
Sabir Michael, un activista católico de derechos humanos, declara a Fides: “Apreciamos los esfuerzos del Presidente de la Corte Suprema en el caso de Asia Bibi: Nisar espera que no haya demoras y que se administre justicia de manera tempestiva. El retraso en la justicia es la muerte de la justicia. El estado de derecho debe prevalecer sobre todos los grupos fundamentalistas y las presiones que estos ejercen”.
Asia Bibi, absuelta por el caso de blasfemia el 31 de octubre, se encuentra ahora en Pakistán en un lugar seguro por orden de la Corte Suprema. Su liberación ha generado una situación tensa en todo el país.
La sentencia de 56 páginas publicada por el Tribunal Supremo y firmada por Saqib Nisar, que sanciona la absolución de Asia Bibi, señala los siguientes motivos que han llevado a declararla inocente:
- el episodio de presunta blasfemia ocurrió el 14.06.2009, pero la primera denuncia (First Information Report) se registró el 19.06.2009, cinco días después. Este retraso, según la jurisprudencia penal, es indicativo de una conspiración;
- las dos mujeres testigos del caso, que discutieron con Asia Bibi, declararon que Asia Bibi expresó comentarios blasfemos contra el profeta Mahoma en presencia de otras 25-30 mujeres, pero ninguna otra mujer ha comparecido ante el tribunal para apoyar tal acusación;
- una mujer testigo declaro en una ocasión que la disputa no estaba relacionada con una fuente de agua potable; mientras que en otras declaraciones sostuvo que sí: hay una clara contradicción;
- testigos presenciales informaron que 1.000 aldeanos estaban presentes en la asamblea pública, celebrada en presencia de imanes locales, para acusar a Asia Bibi; otros hablan de 100 personas, y en otro lugar: también hay versiones contradictorias sobre la duración de esta asamblea.
El Tribunal, constatando las muchas incongruencias, ha decidido que “más allá de toda duda razonable, no se puede afirmar la culpa de Asia Bibi” y, por lo tanto, ha absuelto y ordenado la liberación de la mujer. (AG-PA) (Agenzia Fides 24/11/2018)