VATICANO - El Card. Filoni en Puerto Leguízamo-Solano: geográficamente remoto, pero en el corazón de la Iglesia

miércoles, 25 mayo 2016

El Card. Filoni en el Vicariato apostólico de Guapi

Puerto Leguízamo-Solano (Agencia Fides) – “Este vicariato es una joven Iglesia, erigida el 21 de febrero de 2013 y por tanto, en crecimiento, aunque todavía cuente con una reducida presencia de personal misionero (un sacerdote local, once sacerdotes religiosos, once religiosas y veinte catequistas a tiempo completo). Por eso es fundamental incentivar en nuestros jóvenes la vocación a la vida sacerdotal y consagrada. Y, contando con la colaboración de todos los fieles, es oportuno que se desarrolle entre vosotros una conciencia de auto-conocimiento como Iglesia en crecimiento y de auto-sustento local que la haga llegar a la edad adulta”. Esta ha sido la exhortación del Card. Fernando Filoni, Prefecto de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos, a los fieles del Vicariato Apostólico de Puerto Leguízamo-Solano, reunidos en la Catedral dedicada a Nuestra Señora del Carmen, para la Misa que presidió ayer, 24 de mayo, en el contexto de su visita pastoral a Colombia (véase Fides 19/5/2016).
“Sois parte de la Iglesia de Dios – ha subrayado el Cardenal -. El Santo Padre a través de mi presencia, ha querido hacerse cercano a este vicariato. Por lo tanto, aunque se encuentren en un territorio que geográficamente pueda parecer remoto, no por eso dejan de estar en el corazón de la Iglesia”. Por eso ha exhortado a intensificar los esfuerzos para volver a lanzar la pastoral familiar , “exhortando a los jóvenes a una vida cristiana coherente con los principios del Evangelio, formándolos para que creen auténticas familias cristianas”, y para permitir a los catequistas y a los laicos, la posibilidad de “adquirir una sólida formación cristiana, consolidar su propia fe y afrontar, a través del diálogo, el proselitismo de las sectas”.
En el vicariato apostólico, que se encuentra en la Amazonía colombiana, el Prefecto del Dicasterio Misionero se ha reunido con los catequistas de las comunidades indígenas, sobre todo de Murui y Quichua, ha visitado una comunidad indígena, y ha podido dialogar con las autoridades civiles y militares, además de con los representantes de la realidad eclesial. En la homilía, el Cardenal ha recordado que “el estado jurídico de un vicariato es un paso intermedio antes de convertirse en diócesis. Es algo así como el caso de un joven que está creciendo, pero que aún no es auto-suficiente y, por eso, necesita ayuda en su maduración antes de tener su propia casa”. (SL) (Agencia Fides 25/05/2016)


Compartir: