La Guajira (Agencia Fides) – La corrupción, la ilegalidad, las acciones de las bandas criminales: son los graves problemas que aquejan al país y la administración del departamento de La Guajira: es la denuncia del Obispo de la Diócesis de Riohacha, Monseñor Héctor Salah Zuleta, quien ha expresado su gran preocupación por la situación difícil en una nota enviada a la Agencia Fides. En declaraciones a “Radio Caracol”, el obispo dijo que el gobernador de La Guajira es objeto de fuertes críticas y acusaciones de corrupción, definiendo la situación actual “un desastre, ya que desacredita a todos los que votaron por él”.
En la nota enviada a la Agencia Fides por la Conferencia Episcopal Colombiana, leemos, que el gobernador del territorio de La Guajira, Juan Francisco Gómez, ha sido señalado por tener supuestos vínculos con las llamadas bandas criminales (Bacrim) y estar involucrado en varios casos de asesinato.
El obispo de Riohacha también ha habló de la incompetencia de los gobernantes que La Guajira ha tenido en los últimos años: “Son 30 años que el departamento recibe ayudas y subvenciones. Pero ¿dónde están esas ayudas y subvenciones? Si alguien tiene la intención de buscar bien, se las encontrará en los bolsillos de muchos de los políticos” dijo Mons. Salah Zuleta añadiendo también que la corrupción es visible en áreas como la educación, campo en el que la Iglesia católica ha sido excluida, después de 120 años de meritoria labor en beneficio del desarrollo. “La Iglesia ha sido excluida de los contratos de la educación pública, mientras que el dinero se distribuye ilegalmente. No podemos permitir que se continúe robando el dinero de los pobres”, dijo con énfasis el obispo Salah Zuleta. (CE) (Agencia Fides, 25/05/2013)