Taizhou (Agencia Fides) - El sábado 10 de julio ha sido consagrado Obispo de Taizhou, en la provincia de Zhejian (China), S.E.R. Mons. Antonio Xu Jiwei, de 75 años de edad y 25 de sacerdocio. Desde 1999 guiaba la Diócesis como Administrador Diocesano y ha sido aprobado por la Santa Sede para el cargo de Obispo de Linhai. Las autoridades gubernamentales han aprobado su ordenación episcopal. La celebración litúrgica fue presidida por Mons. José Li Mingsu, Obispo de Qingdao, y por los obispos Mons. José Xu Honggen de Suzhou, y por Mons. José Han Yingjin de Sanyuan. Todos los prelados están en comunión con la Santa Sede y son reconocidos por el Gobierno.
Mons. Xu nació en Shangai el 2 de abril de 1935. Entró en el seminario de Ningbo en 1948, de donde pasó al seminario de Xujiahui (Shangai) hasta 1958. De 1960 a 1985, a causa de asuntos políticos, fue condenado a cinco años de presión y después a largos años de trabajos forzados, incluyendo un periodo de seis años como profesor en una escuela superior. El Prelado recuerda dicho periodo como un tiempo difícil, pero también como un tiempo de gracia, que reforzó su fe y durante los cuales pudo experimentar en la oración como Dios lo amaba profundamente y estaba con él todos los días.
En 1985 regresó al seminario de Shangai y fue ordenado sacerdote en la diócesis de Ningbo, donde trabajó como párroco. En 1999 fue transferido a Taizhou, donde ocupó el cargo de Administrador de la Diócesis, trabajando en la parroquia de Jiaojiang. Mons. Xu pudo estudiar algunos años en el extranjero, primero en Corea y después en Europa.
Un millar de fieles, provenientes también de Shangai y de Ningbo, participaron en la consagración del nuevo obispo, que es el segundo Ordinario de la Diócesis, que quedó vacante desde 1962 hasta la muerte de Mons. José Hou Joshan. La Circunscripción eclesiástica cuenta en este momento con unos 6,000 fieles, unos quince sacerdotes, unas diez religiosas de la Congregación de Santa Teresa Siervas de la Caridad, y con unas 25 iglesias, además de otros lugares de culto. Mons. Xu explicó que son muchos los desafíos que le esperan a la pequeña diócesis de Taizhou, pero que ve con optimismo una recuperación de la evangelización y un crecimiento de la comunidad católica. (Agencia Fides 14/07/2010)