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Tucson (Agencia Fides) - Dentro de 90 días entrará en vigor en el estado de Arizona (EE.UU.), una ley que tipifica como delito la entrada y residencia de los inmigrantes sin documentos en el estado. La ley SB 1070 se firmó el 23 de abril y está causando temor en los miles de inmigrantes ilegales que viven en el estado de Arizona. La medida tomada por el gobernador Jan Brewer es vista como “la más dura y represiva contra los extranjeros” y es considerada por el poder público local una medida para proteger a los ciudadanos estadounidenses y como prevención contra el delito.
Su Exc. Mons. Gerald F. Kicanas, Obispo de Tucson, Arizona, es uno de los Obispos que ha expresado su profundo desacuerdo con respecto a la nueva ley de inmigración, anunciando que pedirá la intervención del Consejo General de la Conferencia Episcopal de los Estados Unidos. En una nota enviada a la Agencia Fides, se reporta lo que dice Mons. Kicanas en su “Monday Memo”, la publicación de la página web diocesana: “se debe contestar a esta ley por motivos relacionados con cuestiones constitucionales que muchos opositores han planteado”. Entre sus objeciones a la ley (“Support Our Law Enforcement and Safe Neighborhoods Act”) el Obispo considera que esta no se ocupa de los puntos críticos reales “para la seguridad fronteriza, para detener el tráfico de drogas, el contrabando de armas y el tráfico de seres humanos”.
Junto con Mons. Thomas J. Olmsted, Obispo de Phoenix, y a Mons. James S. Wall, Obispo de Gallup, N. M., (cuya diócesis abarca parte del norte de Arizona) Mons. Kicanas ha pedido vetar el diseño de ley y realizar un enfoque más amplio, a nivel federal para resolver los problemas de la inmigración.
Incluso el presidente de los EE.UU., Barack Obama, ha expresado sus reservas acerca de la normativa y ha pedido al Departamento de Justicia “examinar las implicaciones a nivel de los derechos civiles”. Por otra parte, la decisión del Gobernador de Arizona, se considera una presión directa sobre el Gobierno Federal, para lanzar a finales de este año la reforma de la ley de inmigración a escala nacional. En Arizona, de acuerdo con estimaciones recientes, serían al menos 500.000 inmigrantes ilegales (alrededor de once millones en todos los EE.UU.), procedentes en gran parte de México. (CE) (Agencia Fides 27/04/2010)
