Shi Jia Zhuang (Agencia Fides) – Las últimas estadísticas de la Iglesia católica en China continental por el Faith Institute for Cultural Studies (FICS) afirman que hasta el 8 de diciembre del 2009 los católicas eran unos 6 millones, asistidos pastoralmente por 3397 personas, entre Obispos, sacerdotes y diáconos. Entre ellos 2268 son sacerdotes distribuidos en unas cien diócesis. Más de 300 son jóvenes sacerdotes religiosos de congregaciones internacionales. Unos 628 seminaristas estudian en 18 seminarios, 630 son los seminaristas menores que se preparan en los 30 seminarios propedéuticos o menores. Las religiosas con votos son 5451 subdividas en 106 Congregaciones religiosas.
La comunidad católica continental administra 381 estructuras caritativas (sin contar los centros para Leprosos). Entre estas hay 220 clínicas, 11 hospitales, 81 casas para ancianos, 44 asilos, una colegio superior, 2 institutos de formación profesional, 22 orfanatos y centros de acogida para niños discapacitados, 3 centros de rehabilitación, 34 centros de servicio social. Unas 80 religiosas trabajan en veinte estructuras gubernamentales que acogen a los leprosos.
Según Li Ma Li, del Faith Institute for Cultural Studies que participó en la elaboración de las estadísticas, “nuestras informaciones han sido recogidas por los sacerdotes responsables, diocesanos y locales, según la participación en las actividades de la Iglesia y el número de personas que reciben regularmente los sacramentos. La recolección de datos ha sido realizada con email, teléfono, fax e incluso con visitas a los lugares. Podemos por lo tanto decir que las estadísticas son bastante precisas, sobre todo en lo que se refiere a los números de los seminaristas mayores y de los seminarios y las estructuras de servicio social de las diócesis. Obviamente existe aún algunas comunidades que viven en situaciones particulares, en consecuencia es difícil tener estadísticas precisas al ciento por ciento. Por ejemplo, diversas parroquias, diócesis o ciudades no han considerado o no han podido realizar algún registro por años, y por ello el trabajo se vuelve bastante exigente”. (NZ) (Agencia Fides 16/12/2009; líneas 25, palabras 333)