Jerusalén (Agencia Fides) – Llevar palabras de consuelo, manifestar solidaridad, darse cuenta de las necesidades existentes para potenciar la asistencia humanitaria: con este espíritu una delegación interreligiosa compuesta por un grupo de rabinos hebreos, sacerdotes católicas e imanes musulmanes, se dirigió en los días pasados a la línea de Gaza recorriéndola a lo largo y ancho, y dando a la población un mensaje de paz y esperanza.
La iniciativa fue bautizada como “Convoy por la paz” y fue saludada con alegría y conmoción por la población local, sensiblemente afectada por el reciente conflicto que, en enero pasado, trajo guerra, dolor y destrucción a Gaza. El organizador del viaje fue el movimiento interreligioso “Hommes de Parole”, con sede en Ginebra, y fue difundido en muchos estados del mundo.
También participó en la iniciativa de manera proficua Caritas de Jerusalén, ya comprometida en la asistencia humanitaria en Gaza (ver Fides 24/3/2009), que aprovechó la ocasión para cumplir un ulterior monitoreo de la situación en Gaza y para entregar a más de 2,100 familias un “kit higiénico” con jabones, detergentes, ropa blanca y objetos varios para la higiene personal y de los lugares. La delegación de los líderes religiosos llevó en su camino palabras de esperanza, alentando a la población y afirmando que los ciudadanos de Gaza “no serán abandonados”. Muchos niños y jóvenes acogieron festivamente el convoy, al entrar éste en las ciudades y poblaciones de Gaza.
La delegación pudo tomar conocimiento de las difíciles condiciones de vida de miles de familias en la línea de Gaza, hasta ahora obligadas a vivir en tiendas (los evacuados internos a Gaza son cerca de 16 mil), y aseguró su apoyo para mejorar las condiciones materiales y psicológicas de las personas enfermas o afectadas por el conflicto.
Todos han reafirmado la exhortación a la asistencia humanitaria y a un plan de ayuda para la reconstrucción y el desarrollo en Gaza.
La presencia de representantes de las tres religiones dio además un testimonio de “solidaridad sin barreras”, tratando de liberar a las conciencias del odio y de la desconfianza, y desarraigando la idea de que el conflicto entre Israel y Palestina es un conflicto entre religiones.
Además, entre las numerosas iniciativas de solidaridad existentes, la cercanía de la Santa Sede y de la Iglesia universal con la población de Gaza es testimoniada por el hecho que las ofertas recogidas durante la Misa “in Coena Domini”, que será celebrada por Benedicto XVI el Jueves Santo (9 de abril próximo), serán dadas en su totalidad a la población de la Franja. (PA) (Agencia Fides 1/4/2009; líneas 30, palabras 423)