Seneca (Agencia Fides) – Don Arul Carasala, párroco de la iglesia de los Santos Pedro y Pablo en Seneca, una ciudad del noreste de Kansas, ha sido asesinado a tiros el jueves 3 de abril por un hombre que irrumpió en la rectoría. Según las primeras informaciones, el agresor, un hombre mayor desconocido para los feligreses, se encuentra ya detenido. Los motivos del crimen aún se desconocen y están siendo investigados por la policía. El sacerdote recibió tres disparos y murió poco después de ser trasladado al hospital.
Don Arul Carasala fue ordenado sacerdote en 1994 en su India natal y ejercía su ministerio pastoral en Kansas desde 2004. En 2011 adquirió la nacionalidad estadounidense y fue nombrado párroco de la iglesia de los Santos Pedro y Pablo en Seneca, una localidad de pocos miles de habitantes.
El arzobispo metropolitano de Kansas City, Joseph Naumann, ha calificado el asesinato como un “acto de violencia sin sentido” que deja a la comunidad “sumida en el dolor por la pérdida de un sacerdote querido, que era también un amigo”. A través de una publicación en sus redes sociales, el arzobispo asegura que “no existe ninguna amenaza para la comunidad de creyentes”, aunque reconoce el profundo “dolor y conmoción” provocados por la muerte del sacerdote. “El padre Carasala era un pastor dedicado y fervoroso que ha servido fielmente a nuestra archidiócesis durante más de 20 años, incluso como decano de la región de Nemaha-Marshall”.
“Su amor a Cristo y a la Iglesia era evidente en la forma en que servía a su pueblo con generosidad y entrega. Sus feligreses, amigos y hermanos en el sacerdocio lo echarán mucho de menos”.
(F.B.) (Agencia Fides 4/4/2025)