Buenos Aires (Agencia Fides) – A causa de la ola de violencia que ha asolado la provincia, el nuevo obispo auxiliar de Córdoba, Mons. Pedro Javier Torres (nombrado el 16 de noviembre) ha definido los actos de violencia como “situaciones de saqueo y criminalidad en lugar de actos de un movimiento social por causa del hambre”. “Todo esto no sucede por la pobreza y la búsqueda de alimentos, - ha dicho el obispo, según la nota enviada a la Agencia Fides por una fuente local -, sino por la presencia de la delincuencia en la provincia”.
La situación en Córdoba se ha vuelto caótica. A una solicitud de ajuste de los salarios, la policía se ha encerrado en los cuarteles, y ha dejado así que grupos de vándalos y delincuentes saqueasen tiendas de todo tipo. Efectivamente, no sólo han sido saqueados los supermercados de alimentos, sino también negocios de electrodomésticos y otros géneros. En muchos casos, los robos se cometieron con violencia y con la destrucción de los locales. Han habido casos de enfrentamientos violentos que se han producido entre delincuentes y las familias que querían proteger su propia tienda.
Mons. Torres, hablando en un canal de televisión local, ha denunciado a las autoridades locales por “el abandono total de la provincia por parte del gobierno central, algo que adolora mucho”. Luego ha juzgado “justa y digna de ser escuchada” la petición hecha por la policía en Córdoba, pero también afirmando que “el fin no justifica los medios. Se debe poner fin a la anarquía”.
La Conferencia Episcopal Argentina ha enviado un mensaje al arzobispo y a la población de Córdoba, expresando su “cercanía y apoyo ante los graves hechos ocurridos en la provincia”. En el texto del Consejo Permanente, enviado a la Agencia Fides, está escrito: “Oremos al Señor para que inspire serenidad y calma en este tiempo de Adviento, y que María, Reina de la paz, proteja a todos los Cordobeses” (CE) (Agencia Fides, 05/12/2013)