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Lima (Agencia Fides) – Abrir un “diálogo constructivo” para poner fin a la huelga, “pensando en el bien común”: es el llamamiento lanzado por el Presidente de la Conferencia Episcopal Peruana, Mons. Salvador Piñeiro García-Calderón, Arzobispo Metropolitano de Ayacucho, al gobierno y a los trabajadores de la salud y de la educación pública, que llevan semanas en huelga. La huelga, para pedir un aumento de los salarios, está provocando un cierre prolongado de las escuelas (desde el 5 de septiembre) y hospitales (desde el 18 de septiembre) causando graves problemas a la población.
En un comunicado enviado a la Agencia Fides, Mons. Salvador Piñeiro recuerda que “la escuela, es un lugar privilegiado para construir un Perú grande, capaz de vencer la pobreza y la injusticia y de fomentar la solidaridad y el desarrollo”. Y añade: la salud es un derecho fundamental de todo ser humano, que los Estados deben garantizar sin privilegios ni exclusiones. Los profesionales de la salud tienen una noble y admirable misión de servicio a la vida y a la dignidad de cada persona”. El arzobispo pide al Gobierno y a los trabajadores “encontrar soluciones, que atendiendo sus justas necesidades, busquen sobretodo el bien común, de modo especial de los niños y adolescentes en edad escolar y de las personas que necesitan atender su salud”. La Iglesia espera que se realice una mesa de negociaciones “evitando la violencia, y dentro de un clima de justicia, solidaridad, diálogo y el respeto mutuo”.
La Federación Médica Peruana (FMP) ha iniciado una huelga exagerada el 18 de septiembre, mientras que el Sindicato de los Trabajadores de la Educación de Perú (Sutep) que reúne a los maestros de la educación pública, desde el 5 de septiembre está en agitación contra la propuesta de ley que reforma la escuela y para pedir un aumento salarial. (CE) (Agencia Fides, 29/09/2012)
