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Abidjan (Agencia Fides) - “El problema de la inseguridad es real, especialmente en las zonas fronterizas con Liberia. Hay demasiadas armas que siguen en circulación, bandas de delincuentes que atacan a los pueblos y crean barricadas en las carreteras” dice a la Agencia Fides Su Exc. Mons. Gaspar Beby Gnéba, Obispo de Man, al oeste de Costa de Marfil, en cuyo territorio se encuentra la ciudad de Tai, donde en los últimos días por lo menos 4 personas murieron en ataques de grupos armados. En la misma localidad, el 8 de junio, según un balance reciente, 10 civiles, 7 cascos azules del Níger y un militar de Costa de Marfil murieron en una emboscada (véase Fides 11/6/2012).
“En la raíz de esta inestabilidad, hay motivaciones políticas y luchas por la posesión de la tierra. Este último problema existía antes de la crisis (que surgió del choque entre el ex Presidente Gbagbo y el actual Presidente Alassane Ouattara), pero ha empeorado en los últimos tiempos. Las poblaciones de otras zonas se han instalado aquí y se disputan las tierras con la población local”, dice Mons. Gnéba. La inestabilidad ha obligado a abandonar sus hogares por lo menos a 5.000 personas, según estimaciones de la Oficina de las Naciones Unidas para Asuntos Humanitarios. La tensión amenaza con extenderse al resto de la Costa de Marfil después de que el gobierno anunció en marzo un intento fallido de golpe militar, organizado por elementos leales al depuesto presidente Gbagbo. (L.M.) (Agencia Fides 14/6/2012)
