AMERICA/MEXICO - La Arquidiócesis de México pide detener la emoción previa a las elecciones y resolver problemas reales como la indiferencia y el desprecio por los inmigrantes

miércoles, 7 diciembre 2011

Ciudad de México (Agencia Fides) - La Arquidiócesis de México ha pedido a todas las instituciones políticas del país detener la "efervescencia" política pre-electoral y hacer frente de manera responsable las emergencias nacionales que están lejos de la codicia desenfrenada de poder de unos pocos: la espiral creciente de violencia, la crisis que sigue generando tantos pobres, y la corrupción, lo que convierte a México en un lugar de muerte para los migrantes, ya sean mexicanos o centroamericanos.
En su órgano oficial de información, "Desde La Fe", la Arquidiócesis critica duramente el hecho de que la clase dominante y la política, los medios de comunicación y el público en general, se dediquen casi enteramente a los asuntos triviales en vez de los problemas nacionales reales. En particular, se queja, en el texto enviado a la Agencia Fides, de "la pereza, la indiferencia y al parecer también del desprecio de los políticos hacia los migrantes. Todos ellos están más comprometidos con la protección de sus intereses personales que en el calvario que viven nuestros hermanos mexicanos en el vecino país del Norte"- La clase política ha logrado evitar por completo del debate público este tema clave.
Esta lentitud ha permitido, como nunca antes había sucedido en los Estados Unidos, emitir una detrás de otra, leyes contra la dignidad de los migrantes y sus derechos humanos básicos "sin ver una respuesta significativa de nuestro gobierno en contra de la actitud arrogante , xenófobo y racista del país", está escrito en la editorial. "La reforma migratoria aprobada en México no debe quedar en letra muerta ", continúa el texto. "El mismo gobierno federal debe garantizar la aplicación de la ley que protege a nuestros hermanos centroamericanos, y así poner fin a la corrupción y la violencia que mata a personas inocentes todos los días, que buscan sólo un trabajo y una vida digna de ser llamada humana", concluye el texto. (CE) (Agencia Fides 7/12/2011)


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