EUROPA/ITALIA - El 26 de junio se celebra la beatificación del padre Clemente Vismara, misionero del PIME, "Patriarca de Birmania”

martes, 5 abril 2011

Milán (Agencia Fides) – El domingo 26 de junio, se celebrará en la Plaza del Duomo en Milán, la beatificación del Padre Clemente Vismara, misionero del PIME (Pontificio Instituto Misiones Extranjeras), conocido como el "Patriarca de Birmania" por haber pasado 65 años allí y contribuido decisivamente a la evangelización de esa nación. Junto a él serán beatificados otros dos hijos de la tierra Ambrosiana: don Serafino Morazzone y la hermana Enriqueta Alfieri. El Arzobispo de Milán, el Cardenal Dionigi Tettamanzi, ha dado el enuncio con una carta a la diócesis, en la que escribe: “Los próximos tres beatos son una confirmación maravillosa de que Dios no se cansa jamás de amar al hombre, al que ha creado con amor y para el amor; son una prueba firme de que Dios nunca deja de inspirar a hombres y mujeres - fieles laicos y consagrados, sacerdotes y misioneros – para que respondan con prontitud y entusiasmo a su sed de amor: «¿A quién enviaré? ¿Quién irá por nosotros?», se pregunta el profeta Isaías y responde: «Heme aquí, envíame» (Isaías 6, 8). Con el mismo ardor del Profeta respondieron a Dios: el padre Serafín, el p. Clemente y la hermana Enriqueta”.
Clemente Vismara nació el 6 de septiembre de 1897 en Agrate Brianza. Huérfano de madre y padre, en 1913 ingresó en el Seminario de San Pedro de Seveso, donde decidió convertirse en misionero, ingresando en el Instituto de Misiones Extranjeras de Milán, actualmente Pontificio Instituto de Misiones Extranjeras (PIME). Ordenado sacerdote en la Catedral de Milán el 26 de mayo de 1923, pocos meses después el padre Clemente partió para Birmania (ahora Myanmar), donde sembró el Evangelio por el resto de su larga vida y donde fue enterrado.
Fundó cinco distritos misioneros, llevo la fe a muchos pueblos, construyendo capillas, iglesias, escuelas, hospitales, etc. recogió a los niños huérfanos de familias destruidas por el hambre, las epidemias y las guerras o a los rechazados porque eran inválidos (a su muerte eran más de 200). Junto ellos daba la bienvenida a cuantos llamaban a la puerta de la misión: viudas, leprosos, ladrones, discapacitados... Escribió numerosas cartas, informes y artículos para revistas misioneras no sólo italianas, donde describía la vida de la misión: para la causa de canonización, iniciada en 1996, la postulación ha recogido 2.200 cartas y 700 artículos. A su muerte en Mongping el 15 de junio de 1988, se extendió rápidamente su fama de santidad y fue llamado "Patriarca de Birmania". En su funeral participaron también budistas y musulmanes. (SL) (Agencia Fides 5/04/2011)


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