AMERICA/BOLIVIA - “Juntos podemos resolver los problemas": el Cardenal Terrazas Sandoval, después de las lluvias torrenciales infunde coraje

martes, 1 marzo 2011

La Paz (Agencia Fides) – La Iglesia Católica en Bolivia ha invitado a los ciudadanos “a unirse ante los desastres naturales" que, entre enero y febrero se han cobrado la vida de casi 60 personas y han dejado a casi 60.000 personas sin hogar, destruyendo miles de hectáreas de cultivos y pastos. El gobierno ha declarado el estado de "emergencia nacional" y ha enviado a sus ministros a las regiones afectadas para coordinar los esfuerzos de socorro y ayudar a las víctimas, junto con los gobiernos locales y los municipios.
“Podemos resolver los problemas juntos, con la ayuda y la iluminación del Señor”, ha dicho en su homilía dominical, el Cardenal Julio Terrazas Sandoval, Arzobispo de Santa Cruz de la Sierra, Primado de Bolivia. El Cardenal ha instado a los fieles a reflexionar sobre el daño que puede provocar la naturaleza con algunas de sus manifestaciones más violentas.
Según un primer informe de la Protección Civil, unas 65 personas han muerto por el desbordamiento de los ríos, las inundaciones y los deslizamientos de tierra después de doce horas de fuerte lluvia continua. Las zonas de Villa Canillitas, Providencia, Santo Domingo y Manaco, al norte de La Paz, están casi completamente invadidas por el barro desde hace más de siete días, debido al desbordamiento de los ríos Huayculi y Rocha. El problema más grave es el agua que entra en las casas y la falta de bombas para extraerla. Además en la zona empiezan a aparecer los mosquitos, trayendo consigo ulteriores molestias para todos.
En una nota que ha enviado a Fides la Radio Onda Azul, Williams Rioja, director del departamento de Alerta Temprana y Gestión de Riesgos del Gobierno, ha declarado que el mayor número de familias afectadas se encuentra en Palos Blancos, donde unas 1.500 familias lo han perdido todo, especialmente la tierra cultivada. En Guanay se estima que 500 familias se han visto afectadas, aunque el nivel del agua ha disminuido en los últimos días. Además, las comunidades de Ixiamas, San Buenaventura y Alto Beni todavía están esperado las ayudas. (CE) (Agencia Fides, 01/03/2011)


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