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Munich (Agencia Fides) – Del 12 al 16 de mayo se lleva a cabo en Munich de Bavaria la segunda Jornada Ecuménica de las Iglesias (Ökumenischer Kirchentag). La dirección nacional de las Obras Pontificias en Alemania, “Missio”, está presente con más de 40 iniciativas cuyo objetivo es, entre otros, ilustrar el trabajo de la Iglesia en la lucha contra el Sida, su compromiso por los derechos del hombre y por el diálogo pacífico entre las religiones y el compromiso ecuménico contra la violencia juvenil en Sudáfrica. Asimismo, ante la invitación de “Missio”, son muchos los socios de las Obras Misionales Pontificias en todo el mundo que intervienen con ocasión de la Jornada Ecuménica de las Iglesias en Alemania, entre ellos también el Arzobispo siro-católico de Mosul en Irak, Su Exc. Mons. Georges Casmoussa (ver Fides del 12/05/2010).
En la vigilia del importante encuentro ecuménico, “Missio” Munich ha también inaugurado nuevos locales en la ciudad, presentando, entre otras cosas, un recorrido expositivo sobre la vida de las poblaciones que viven en los países en los cuales las POM realizan sus trabajos.
Sobre el significado del ecumenismo para el trabajo de las Obras Pontificias en Alemania, el director nacional de “Missio” Munich, P. Eric Englert, O.S.A., dijo: “Me alegra mucho el hecho de que en “Missio” exista una larga y consolidada tradición de colaboración ecuménica con nuestros hermanos protestantes y con las obras caritativas de la Iglesia luterana en Alemania. Buscamos resaltar esta colaboración fraterna también en nuestras iniciativas con ocasión de la Jornada Ecuménica de las Iglesias”.
Entre los invitados a la “Jornada” estuvo también presente el Presidente del Consejo de las Conferencias Episcopales Europeas (CCEE), Cardenal Peter Erdo, Arzobispo de Estergom-Budapest. En su homilía con ocasión de la Misa de las naciones celebrada en la iglesia de San Michele en Múnich ayer en la tarde, 14 de mayo, el Cardenal ha recordado que “la misión de los apóstoles y la de los cristianos no es una obra humana” por lo cual “no podemos pensar que el éxito de la misión de la Iglesia sea sólo el resultado del conocimiento y del esfuerzo de los hombres”. También invitó a todos a rezar “para que con la luz y la fuerza del Espíritu Santo, a través de nuestro servicio a la misión y en el trabajo pastoral en pueblos y comunidades diversas, podamos ser un auténtico signo e instrumento del amor salvador de Dios”. (MS) (Agencia Fides, 15/05/2010 líneas 27, palabras 402)
