VATICANO - Seminario de estudio para Obispos - Su Exc.Mons. Hoser presenta la estructura y las competencias de las Obras Misionales Pontificias

miércoles, 20 septiembre 2006

Ciudad del Vaticano (Agencia Fides) - El Secretario adjunto de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos y Presidente de las Obras Misionales Pontificias (OMP), Su Exc. Mons. Henryk Hoser, ha presentado a los Obispos reunidos en Roma en el Seminario de estudio, la estructura y competencias de las Obras Misionales pontificias. La salvación del mundo se realiza por medio de la Iglesia, cuyo carácter misionero ha sido varias veces repetido por el Magisterio; la Iglesia es misionera en cuanto ha recibido del Señor Jesús la misión de evangelizar; desde su fundación y a lo largo de toda su historia la Iglesia no ha dejado nunca de enviar misioneros hasta los últimos confines de la tierra: son estas las bases teológicas con las que Mons. Hoser ha iniciado su intervención.
"La misión es confiada a toda la Iglesia Universal, en la totalidad de sus miembros. Así evangelizar no es nunca un acto individual y aislado. Se trata de un acto intensamente eclesial realizado de forma solidaria como expresión de la actividad evangelizadora de toda la Iglesia" ha continuado el Presidente de las OMP. La obra misionera se realiza entre los dos polos de la Iglesia universal y de la particular. Esta polaridad engendra "un campo energético" benéfico y vivo que determina "una conciencia de pertenecer a una gran comunidad que ni el espacio ni el tiempo podrán limitar". Entre las orientaciones sobre el empeño misionero de las Iglesias particulares sugerido a este propósito, Mons. Hoser ha indicado la necesidad de ir al encuentro incluso de los que no creen ya, de los indiferentes, los ateos, los pertenecientes a otras religiones; además viene confiada a la Iglesia particular, en su testimonio de fe, de amor, de una caridad sin límites, el ministerio de la palabra, de su proclamación, que es necesaria para que el Evangelio sea escuchado; los sacerdotes locales, junto a los misioneros, unidos bajo la autoridad del Obispo, deben organizar una acción común para predicar el Evangelio a quienes se encuentran fuera de la pastoral ordinaria; por último, la Iglesia local debe asegurar la formación permanente de los operadores pastorales, con el objetivo de "adquirir un conocimiento más profundo de la teología y de los métodos pastorales en medio de los cambios del mundo actual."
El arzobispo ha tratado después del "munus missionalis" del Obispo, que comporta el compromiso de abrir la Iglesia particular a las necesidades de otras Iglesias, de suscitar entre los fieles el espíritu misionero, de promover la animación misionera sustentando específicamente las vocaciones misioneras, de desarrollar un ferviente espíritu misionero entre los sacerdotes, religiosos, religiosas, seminaristas y laicos…
Después de haber recorrido brevemente la historia de las cuatro Obras Misionales Pontificias, Mons. Hoser se ha centrado en ilustrar su tríplice carácter: carismático, episcopal y pontificio. "Las Obras Misionales Pontificias, que son las Obras del Papa, son al mismo tiempo las Obras de todo el episcopado y de todo el pueblo de Dios - ha dicho el arzobispo -. Están al servicio de toda la Iglesia encarnándose en la vida cristiana cotidiana de pueblos y naciones, constituyen un pilar importante del puente que está construyendo la Iglesia hacia todos los pueblos y todas las religiones, por medio de la evangelización y el Diálogo".
En la parte conclusiva de su intervención, el Presidente de las Obras Misionales Pontificias ha descrito su estructura (Comité supremo, Consejo superior, Comité ejecutivo, Secretariados generales), su presencia en el territorio (a nivel continental y regional, nacional y diocesano) y por último, ha hablado de la importancia del Fondo universal de Solidaridad. De la amplia ilustración de la identidad y la estructura de las OMP deriva que ellas no "son una agencia de ayuda suplementaria a la financiación de la vida eclesial y social en los países en desarrollo" ha subrayado Mons. Hoser, sino que "son el cemento que consolida la estructura rica y variada de la Iglesia, enviada a las Naciones". (S.L) (Agencia Fides 20/9/2006; Líneas: 48 Palabras: 672)


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