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Katmandú (Agencia Fides) - “Estamos todos sanos y salvos y los católicos no hemos sufrido ataques o pérdidas. Pero estamos cansados de la violencia y las destrucciones. El Rey ha anunciado que está dispuesto a restituir el poder al pueblo, a través del Parlamento, pero es verdad también que la gente ya no cree en él, y tanto menos la oposición y los rebeldes maoístas. El pueblo pide democracia y una república. Esto es lo que se oye en los discursos de los simples ciudadanos. Esperemos que la paz triunfe en la nación. Todos tenemos necesidad de la experiencia de la Resurrección”. Es el testimonio enviado por el P. Pius Perumana, pro-Prefecto Apostólico del Nepal, tras varios días de manifestaciones en las calles en las que la población expresa su desconfianza frente al Rey Gyanendra.
Ayer, 24 de abril - tras algunas jornadas en las que la policía ha reprimido con la violencia a los manifestantes (desde el inicio de la protesta hasta ahora se cuentan 14 muertos) - el Rey ha concedido la reapertura del Parlamento, disuelto en 2002. “Es la victoria del pueblo”, han gritado en la noche millones de personas, que han invadido las calles de Katmandú para celebrar la decisión. “Estamos todos llenos de alegría, sobre todo por el fin de las violencias. El toque de queda está todavía en vigor, pero nadie lo respeta, como ha sucedido en los día pasados. Sólo que esta vez la orden está siendo ignorada por un motivo festivo. Esperemos que todo vaya mejor”, ha declarado Mons. Anthony Sharma, Prefecto Apostólico de Nepal.
En cambio, los guerrilleros maoístas, han pedido a la población que continúe la protesta pacífica, ya que el soberano no ha hecho caso a la petición que se le ha hecho de redactar una nueva Constitución, por lo que han decidido efectuar un bloqueo a la capital.
Mientras tanto los siete partidos de la oposición en Nepal, han indicado ya el nombre del nuevo Primer Ministro: el elegido es el anciano Girija Prasad Koirala (del Partido del Congreso del Nepal), ex primer ministro, que estuvo en prisión un breve periodo del año pasado.
La manifestación de protesta convocada para hoy, 25 de abril, se ha trasformado en una “marcha de la victoria”: a Katmandú han llegado centenares de miles de personas para celebrar lo que se considera un importante primer paso para el restablecimiento de la democracia.
Comentando la situación del país y las condiciones de la comunidad católica, P. Pius señala: “La Iglesia no toma partido por ninguna de las dos facciones ni sostiene ninguna ideología. No hemos participado en las manifestaciones de protesta. En los días pasados Mons. Sharma envió una carta circular a todas las parroquias y asociaciones eclesiales, pidiendo una hora de Adoración Eucarística cada día, para rezar por la paz del país. Mientras, todas las escuelas e instituciones dirigidas por la Iglesia permanecen cerradas. Apenas la tranquilidad y paz social se restablezcan, será necesario enfrentarse con una situación económica muy difícil. También los precios de los bienes de primera necesidad están por las nubes. La gente sobrevive con dificultad. Urge una solución política definitiva para el bienestar de toda la nación”. (PA) (Agencia Fides 25/4/2006 Líneas: 39 Palabras: 562)
