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Jartum (Agencia Fides) - La escasez de medicamentos, la falta de fondos, la inseguridad y una inminente catástrofe sanitaria representan el cuadro de una situación sanitaria en colapso. El Ministerio de Sanidad sudanés informó ayer de 138 nuevos casos de COVID-19 y cinco muertes en los últimos tres días. Las principales zonas afectadas son Jartum, El Gezira, Sennar, North Darfur y Northern State.
Los médicos del país han dado la voz de alarma, porque falta también oxígeno y camas de hospital. Los hospitales han interrumpido todas las actividades, excepto los casos de emergencia. Los manifestantes, que protestaban contra las continuas agresiones violentas a médicos y personal del hospital por parte de los familiares de los pacientes, anunciaron que la huelga se desconvocaría después de que las autoridades estatales atendieran parte de las demandas de los médicos, incluida la protección por parte de la policía.
La asociación de médicos reclama un entorno de trabajo seguro, el suministro de medicamentos para salvar vidas y el compromiso del Banco Central de Sudán, que aún no ha proporcionado fondos para la importación de medicamentos desde principios de 2021. Según la Socialist Doctors Association, actualmente sólo hay un 46% de disponibilidad de medicamentos en el país, sólo 326 de los 709 tipos de medicamentos vitales y de emergencia. Los suministros necesarios para tratar el cáncer, las enfermedades renales, los problemas cardíacos y la diabetes están casi agotados.
La sentada del hospital de Jartum contra la descomposición de 190 cadáveres en la morgue del hospital ha entrado en su tercera semana a pesar de las redadas.
(AP) (Agencia Fides 12/5/2021)
