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Nueva Delhi (Agencia Fides) - "Después de la tragedia del terremoto, Mons. Celestine Elampassery, Obispo de Jammu y Srinagar, no ha esperado se ha puesto inmediatamente en marcha visitando las zonas afectadas y organizando los primeros socorros. El hospital y la escuela de San José en el distrito de Baramulla se han convertido bien pronto en un gran centro de clasificación y coordinación de las ayudas. La respuesta de la Iglesia católica y de todos los organismos de solidaridad cristianos ha sido rápida y eficaz", cuenta el p. Babu Joseph, portavoz de la Conferencia Episcopal Indiana, señalando como Caritas India ha provisto inmediatamente de comida, medicinas, tiendas para los refugiados, por medio de sus voluntarios, una red estrecha de hombres y mujeres que conocen bien el territorio de Cachemira.
"Los institutos, iglesias, escuelas católicas, aunque en número exiguo en la región, se han transformado a en grandes centros de acogida para los sin techo, y por la recogida de ayudas. La Iglesia ha abierto sus puertas a todos los pobres, testimoniando el amor de Dios hacia cada hombre, sin discriminación de raza, cultura, casta, clase social o religión. Siendo la comunidad islámica predominante con gran mayoría en Cachemira, los evacuados acogidos y asistidos por la Iglesia son casi todos musulmanes. Pero en esta tragedia lo que cuenta es el hombre y su dignidad. La solidaridad va más allá de las diferencias de pensamiento y religión", subraya el p. Babu Joseph.
A la vez que las cifras sobre los muertos y evacuados siguen aumentando, Caritas India está distribuyendo, a pesar de las dificultades en los transportes y el clima rígido, más de 1.000 mantas al día, ayudando a centenares de familias, en un servicio que está suscitando en la población india inmensa gratitud.
Mons. Félix Machado, indiano, Subsecretario de Pontificio Consejo para el Diálogo Interreligioso, comentando la gestión de la emergencia y la movilización de los católicos, ha declarado: "La percepción de la Iglesia católica en la opinión pública indiano, a pesar de una campaña de algunos grupos integristas para desacreditarla, es óptima. La prueba se tiene especialmente en los momentos de emergencia, cuando la Iglesia se convierte en un punto de referencia para las ayudas humanitarias: los ciudadanos indianos reconocen su eficiencia y la calidad de la asistencia, llevada a cabo sin discriminaciones, sin corrupción, sin privilegiar intereses personales, antes bien, en la máxima transparencia, haciendo que todas las donaciones lleguen a sus verdaderos destinatarios. Es lo que está sucediendo en la emergencia en Cachemira, dónde la comunidad católica, aun siendo muy pequeña, se ha convertido inmediatamente en punto de referencia". (PA) (Agencia Fides 12/10/2005 Líneas: 34 Palabras: 458)
