Hassaké (Agencia Fides) – Hay por lo menos 70 soldados voluntarios armenios dentro de las filas curdas de la Unidad de protección popular (YPG), que de forma paralela a las unidades del ejército sirio luchan para liberar a la ciudad de Hassake de la presencia de la milicia del Estado Islámico (Daesh). Esto lo han confirmado fuentes kurdas, proporcionando también actualizaciones sobre la situación en el terreno, que ve en clara dificultad a las milicias yihadistas, con 1.200 militantes sitiados en algunos barrios de la ciudad sin vías de escape.
El domingo 19 de julio los helicópteros del ejército del gobierno bombardearon zonas de la ciudad todavía bajo el control del Estado islámico. Los activistas locales vinculados a las redes de información curdas han referido sobre el retorno gradual a sus hogares de los habitantes que huyeron antes de la ofensiva yihadista. Según fuentes locales contactadas por la Agencia Fides, el arzobispo siro-católico Jacques Behnan Hindo también ha regresado a Hassaké, después de haberse refugiado varias semanas en Qamishli, junto con sus fieles.
La ciudad siria de Hassake, la más grande de la provincia nororiental de Jazira, a finales de junio fue objeto de un ataque vehementes de los militantes del Estado Islámico (Daesh), que lograron ocupar varios barrios, provocando el éxodo masivo de almenos 120 mil personas (véase Fides 30/06/2015). Entre los primeros en huir estaban 4.000 familias cristianas pertenecientes a diversas Iglesias (caldeos, asirios, sirios católicos y siro-ortodoxos) que en gran parte aún viven como refugiados en la cercana zona urbana de Qamishli. (GV) (Agencia Fides 20/7/2015).