Kirkuk (Agencia Fides) - Una oleada de atentados terroristas golpeó ayer, domingo 16 de diciembre, la ciudad de Kirkuk, causando nueve muertos (entre ellos 2 niños) y más de cincuenta heridos. Dos ataques coordinados - realizados con dos coches bomba y siete bombas colocadas a los lados de las carreteras - han atentado contra dos mezquitas chiítas en las afueras de la ciudad. Pero las explosiones se han percibido claramente también en la catedral caldea del Sagrado Corazón, mientras se estaba celebrando la Santa Misa presidida por el Cardenal Leonardo Sandri, Prefecto de la Congregación para las Iglesias Orientales, provocando ansiedad entre la mayoría de los fieles presentes.
Con la secuencia de acontecimientos sangrientos que están ocurriendo en los territorios disputados entre el gobierno de Bagdad y la administración autónoma del Kurdistán iraquí - nuevos atentados en la región han causado al menos 11 muertos hoy - también la visita del Cardenal Prefecto a Iraq está tomando una connotación inesperada. Ayer, antes de la celebración solemne de la misa en lengua caldea, árabe e inglesa (a la que también asistió el Arzobispo Louis Sako y el Nuncio Apostólico Giorgio Lingua) el Cardenal Sandri había visitado la gran mezquita sunita en Kirkuk, reuniéndose con una delegación calificada representantes islámicos.
El imán de la mezquita, Ahmad Amin, había recibido al Cardenal invitándolo a expresar sus sentimientos de estima y respeto al “Santo Padre Benedicto XVI”, y elogiando las iniciativas de colaboración y diálogo inspiradas localmente por le Arzobispo Sako. El Sheik chiíta Abbas Fadhil, y el otro líder de la comunidad local sunita, Ali Iman, expresaron conceptos similares. En respuesta a los periodistas después de la misa, el Cardenal Sandri había reafirmado la importancia de proteger la permanencia en Iraq de las comunidades cristianas autóctonas, y señalado que sin los cristianos el país perdería su identidad histórica.
Esta mañana, el Cardenal Sandri ha visitado al gobernador de Kirkuk, el curdo Necmettin Karim, que lo ha saludado con respeto, condenando los atentados como resultado de una estrategia de terror diseñada y construida por fuerzas externas para sabotear la tradición de convivencia pacífica que caracteriza las relaciones entre los diferentes grupos étnicos y religiosos de la región. Después, el Prefecto de la Congregación Vaticana para las Iglesias Orientales ha trasladado a Erbil, donde se reunirá con Mas'ud Barzani, presidente de la región autónoma del Kurdistán.
“La visita del Cardenal Sandri”, confiesa a la Agencia Fides el Arzobispo de Kirkuk Louis Sako, “ha sido un momento importante para todos nosotros. Hacía nueve años que no venía a Iraq como representante oficial de la Santa Sede. Gracias a la visita del Cardenal Sandri hemos percibido el afecto y la preocupación del Papa Benedicto XVI por los cristianos de Iraq y por todos nosotros iraquíes” (GV) (Agencia Fides 17/12/2012).