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Pekín (Agenzia Fides) - Es tradición que el Presidente de Filipinas recién elegido viaje a los países de la área a comienzos de su mandato: de esta manera, la Presidenta filipina Gloria Arroyo, elegida el pasado mes de mayo, ha empezado el 2 de septiembre su visita oficial de tres días a Pekín firmando con el Presidente chino Hu Jintao un acuerdo de cooperación con China en materia de turismo, energía, pesca, comercio, inversiones.
Se estima que el volumen de negocios de los intercambios comerciales pasará de los 9 millones de dólares aproximadamente de 2003 a unos 14 millones de dólares en 2004, con el objetivo de llegar a 20 millones de dólares en los próximos cinco años - ha dicho la Presidenta Arroyo al final de la entrevista.
Se ha alcanzado un acuerdo con las empresas constructoras de enlaces de autopistas, que se clausurará en 2008, para la descongestión del tráfico en Manila, que prevé una intervención de 400 millones de dólares. Muy importante es el acuerdo firmado en el sector turístico: facilitar la expedición y el coste de los visados, un hecho que hará aumentar el flujo turístico de los ciudadanos chinos hacia Filipinas.
Una de las prioridades del encuentro ha sido la intención de transformar el mar de la China del Sur de zona de conflicto en zona de cooperación, en el contexto de las relaciones bilaterales y multilaterales: por eso los dos países han firmado un acuerdo sobre la pre-exploración marina para la búsqueda del petróleo y sobre la reglamentación para la pesca en la zona, declarando estar dispuestos a acabar con la disputa por las islas Spratlys, el archipiélago parcial o totalmente reivindicado por seis países asiáticos: China, Filipinas, Brunei, Malasia, Vietnám y Taiwán.
Otro acuerdo se ha alcanzado con respecto a la prevención de la SARS (Severe Acute Respiratory Syndrome), la pulmonía atípica que el año pasado atormentó China y el Sureste asiático. Las más altas autoridades sanitarias filipinas viajarán a la provincia de Guangzhou para estudiar las formas utilizadas por el gobierno chino para contrarrestar el contagio de la enfermedad.
(PA) (Agenzia Fides 3/9/2004 - líneas 34; palabras 384)
