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Trípoli (Agencia Fides) - “El Lunes de Pascua, hemos sido testigos de un terrible bombardeo en Trípoli, pero esto no ha impedido a los fieles el dirigirse a la iglesia. Me ha impresionado de forma particular el número de filipinos que han venido, no sólo para orar, sino también para reunirse y estar juntos. Estas personas están dedicadas realmente a servir a los enfermos", dice a la Agencia Fides Mons. Giovanni Innocenzo Martinelli, Vicario Apostólico de Trípoli. "Durante estos días también hemos visitado algunos centros de los alrededores de Trípoli para reunirnos con los católicos con motivo de la Semana Santa - añade Monseñor Martinelli -. lamentablemente no hemos podido llegar a otros centros”.
El Vicario Apostólico de Trípoli reitera a Fides su pesar por el hecho de que no se trate de encontrar una solución pacífica a la crisis: "Las Naciones Unidas han decidido hacer la guerra y no admiten ya el diálogo como un medio para resolver el conflicto. Todos quieren continuar con la solución de las bombas. Es algo triste y terrible, porque no va a cambiar nada. Es una derrota para la humanidad”.
Acerca de la decisión de las autoridades de Trípoli sobre el involucrar a las tribus locales con el fin de negociar una salida a la crisis en la ciudad de Misurata, durante semanas en el centro de un dramático enfrentamiento entre los rebeldes y las fuerzas regulares, y donde la situación de los civiles es dramática, Mons. Martinelli comenta: "Creo que es lo más razonable, porque la crisis de Libia no se limita a la sola persona a Gadafi, sino que implica todo un sistema de relaciones. No debería limitarse a Misurata, sino que se debería encontrar una manera de involucrar a las tribus en el diálogo también en el resto de Libia", dice el Vicario Apostólico. (L.M.) (Agencia Fides 27/4/2011)
