AFRICA/COSTA DE MARFIL - El Nuncio en Abidján denuncia graves violaciones de los derechos humanos y da testimonio de la ayuda a las víctimas que está realizando la Iglesia

Abidján (Agencia Fides) - “Los civiles son las primeras víctimas; sufren una grave violencia", ha afirmado Su Exc. Mons. Ambrose Madtha, Nuncio Apostólico en Costa de Marfil, a la sección francesa de Ayuda a la Iglesia Necesitada (Aide à l'Église en Detresse, AED) , la cuál ha enviado a la Agencia Fides un comunicado al respecto. "Se están produciendo muchos homicidios (muchas personas han muerto por los disparos de las armas pesadas, degollados, quemados vivos), hay secuestros, saqueos, etc ..." denuncia el Nuncio. "Las familias huyen de la violencia y se refugian en su mayoría en las iglesias." La Diócesis de Man (en particular las ciudades de Agboville y Duékoué, donde han sido descubiertas fosas comunes con cientos de cadáveres) y las Archidiócesis de Abidján y de Gagnoa son las más afectadas.
“Las personas desplazadas se ven privadas realmente de todo, porque se han visto obligados a dejarlo todo para escapar", explica Mons. Madtha. "No hay comida, agua potable, medicinas, ropa. Asistimos a esta gente, compartiendo con ellos lo poco que tenemos. Pero frente a la gravedad de la situación y las inmensas necesidades, os pedimos que nos ayudéis", concluye el Nuncio.
La AED ha enviado ayuda por un valor de 25 mil euro como una primera forma de socorro. "No son expertos en ayudas de emergencia", declara Marc Fromager, Director del AED, “pero no podemos permanecer indiferentes ante este drama que está sucediendo ante nuestros ojos”.
El Papa Benedicto XVI ha lanzado hoy, 6 de abril, un llamamiento para que se ponga fin a la violencia en Costa de Marfil. "Continúo siguiendo con gran preocupación – ha dicho el Santo Padre - los dramáticos acontecimientos que las queridas poblaciones de Costa de Marfil y de Libia están viviendo en estos días . También espero – ha añadido - que el Cardenal Turkson, al que he enviado a Costa de Marfil para expresar mi solidaridad pueda entrar pronto en el país. Rezo por las víctimas – ha continuado el Papa - y me siento cercano a todos aquellos que están sufriendo. La violencia y el odio son siempre una derrota”. (L.M.) (Agencia Fides 6/4/2011)